Newell’s fue de menor a mayor y festejó una victoria Gigante

Newell’s venció 1-0 a Central en un pobre clásico rosarino jugado en el Gigante de Arroyito. Juan Manuel García, a los 6 minutos de la etapa complementaria, marcó el gol del equipo de Javier Sanguinetti, que hizo suya la edición 174 de uno los clásicos más pasionales del fútbol argentino.

Con este triunfo Newell’s se ubica quinto en la zona 1 con 13 puntos, en tanto que Rosario Central quedó décimo en la zona 2 con 7 unidades.

El juego empezó tres minutos tarde porque la barra brava local arrojó cinco bombas de estruendo y comenzó con tamaña presión que el debutante lateral izquierdo visitante Martín Luciano cometió una mano para cortar un contraataque en la mitad de cancha, a los 40 segundos, y el árbitro no sancionó con amonestación, sanción que recién aplicó a los 11 minutos por una falta sobre Damián Martínez.

Además, Pablo Echavarría no sancionó un claro penal cuando a los 35 minutos el zaguero colombiano Ditta bajó una pelotazo largo con el brazo derecho.

Central y Newell’s jugaron un primer tiempo de mucha más fricción y pierna fuerte que buen juego, y en este contexto salió mejor parado Newell’s, que intentó suplir su falta de fútbol con desbordes por la derecha, laterales y centros de pelota detenida, como en su única llegada del primer tiempo, cuando Francisco González colocó un buen centro desde la derecha que García cabeceó de emboquillada y la pelota se fue por arriba.

El complemento mostró lo mejor de Newell’s y a los 6 minutos Méndez aprovechó la espalda de Blanco para gambetear a Ojeda y a Almada, colocó un centro pasado, que Garro recibió solo por la izquierda del área, “fusiló” a Servio de volea, el arquero salvó a medias y García la empujó a la red.

El gol fue un golpe de nocaut para Central, que generó sólo dos llegadas claras para empatar en dos mano a mano de Ruben salvados por Macagno a los 17’ y 25’.

Newell’s se dedicó a defenderse y a los 30’ el ingresado Sordo gambeteó a Blanco en el borde derecho del área pero elevó el remate, solo con el arquero.

Central intentó llegar hasta el final empujado por sus hinchas, pero ni siquiera volvió a acercarse con peligro, en lo que fue el partido final del ciclo del “Kily” González, que renunció.

Newell’s se quedó con el clásico después de siete partidos sin victorias por su juego de menor a mayor y, sobre todo, porque supo definir una de sus tres llegadas a fondo.