Heredia marcó de volea para el delirio y el triunfo de Estudiantes 1 a 0 ante Talleres

Delirio en el último segundo. En un final de locos en UNO, Estudiantes le ganó a Talleres 1 a 0 y así terminó con fiesta una tardecita de domingo donde no la había pasado bien ante un rival dinámico y peligroso.

El golazo de Leonardo Heredia le brindó a Estudiantes una satisfacción impensada cuando ya estaba en tiempo de descuento. Su zurdazo se clavó en el arco de Guido Herrera, y así el Pincha triunfó por un pleno y la gente se quedó cantando en las tribunas luego de haber soportado un partido por demás exigente.

Con esta victoria agónica, el equipo del Ruso Zielinski sumó tres puntos importantes que lo mantiene en carrera para la clasificación directa a la Copa Libertadores del próximo año, certamen del que se quedó afuera hace unos días y "sanó" esta jornada brindándole una alegría a su gente. El siguiente partido será el jueves a las 21.30 horas ante Argentinos Juniors en La Paternal.

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Ante una gran concurrencia que ovacionó tanto a los jugadores como a Ricardo Zielinski, Estudiantes, después de todo lo que generó su eliminación de la Libertadores, salió a jugar con gran energía el partido frente a Talleres de Córdoba.

Poniendo en cancha a sus titulares, el León lució decidido a recuperar el terreno perdido en el torneo de la Liga Profesional.

Fue un partido con responsabilidades extendidas para Manuel Castro, quien debió recorrer toda la banda derecha al iniciar el juego ocupando el puesto del lesionado Leonardo Godoy.

En el minuto 17 Rodrigo Garro desperdició una gran oportunidad para abrir el marcador. Desde una posición cercana al punta del penal pateó muy fuerte, falló en la dirección y la pelota se fue por arriba del travesaño provocando un gran susto para toda la gente del Pincha.

Fue la mejor llegada de Talleres, pero no la única. Benavídez también pisó el área con decisión y también se equivocó en el momento de patear al arco. Fueron momentos complicados para el dueño de casa, que se veía desbordado por el despliegue físico de los cordobeses.

A Estudiantes le costó generar peligro en el área de Talleres y probablemente tuvo que ver con cierta incomodidad de sus hombres en el dibujo táctico, donde por ejemplo el uruguayo Castro lucía atado a la posición de marcador lateral derecho.

La tarjeta amarilla de Leandro Díaz y un posterior aplauso muy cerca del rostro del árbitro generaron un montón de comentarios. El comportamiento del Loco parece incorregible y la falta de autoridad del árbitro quedó absolutamente en evidencia.

A esa altura del primer tiempo estaba claro que Estudiantes no estaba jugando bien más allá de sus ganas por regresar al camino de la victoria.

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Eros Mancuso por Luciano Lollo y el uruguayo Mauro Méndez por Leandro Díaz fueron las modificaciones que decidió el Ruso para afrontar, con mejor impronta, el capítulo final.

Pese a los cambios, Talleres siguió siendo el mejor en los primeros diez minutos porque tapaba todas las opciones de pase de Estudiantes en base a un despliegue físico notable.

La mejor postal albirroja de la tarde fue con Mauro Boselli como protagonista. Un rechazo de la defensa visitante le dejó la pelota con buen perfil, enfrentó al arquero y su remate pensado rebotó en el travesaño.

La situación de mayor peligro anotada para el anfitrión procuró inyectar optimismo para todo lo que faltaba y Estudiantes emparejó la lucha por algunos minutos.

La inclusión de Benjamín Rollheiser, relevando a Pablo Piatti (de floja labor) fue otra apuesta para cambiar una tendencia que no era favorable para el León.

Un cabezazo de Zuqui, tras centro de Mancuso desviado por Herrera, rebotó en la base del palo derecho. Estudiantes seguía peleando un partido que se le hacia muy complicado por la dinámica de su rival.

Sólo la falta de puntería de Talleres explicaba que el partido siguiera con el marcador en blanco. Fueron evidentes los errores de la visita en varias situaciones que se le presentaban favorables.

Cuando a los 35 minutos Zielinski llamó a Zapiola para hacerlo ingresar por Boselli, significó la última apuesta por adueñarse un poco de la tenencia y así restarle protagonismo al ritmo que imponía el huésped. El cambio de Heredia por Castro pasó desapercibido para la gente.

Una nueva aparición de Zuqui, a los 39, estuvo a centímetros de terminar en gol. Su volea de zurda se fue pegada a la base del palo derecho.

Ya, cuando el partido moría, exactamente a los 48 del complemento, Leonardo Heredia le brindó a Estudiantes una satisfacción impensada cuando definió de volea al arco de Herrera para marcar el único gol que le dio el triunfo y algarabía a los pincharratas en las tribunas.

Foto // Dolores Ripoll EL DIA

Foto // Dolores Ripoll EL DIA

SÍNTESIS

Estudiantes: Mariano Andújar; Agustín Rogel, Luciano Lollo y Jorge Morel; Manuel Castro, Jorge Rodríguez, Fernando Zuqui y Emmanuel Más; Pablo Piatti; Mauro Boselli y Leandro Díaz. DT: Ricardo Zielinski.

Talleres de Córdoba: Guido Herrera; Gastón Benavidez, Matías Catalán, Lucas Suárez y Enzo Díaz; Rodrigo Villagra y Christian Oliva; Diego Valoyes, Rodrigo Garro y Francisco Pizzini; Michael Santos. DT: Pedro Caixinha.

Gol en el segundo tiempo: 48m. Heredia (E)

Cambios en el segundo tiempo; antes del comienzo, Eros Mancuso por Lollo y Mauro Mendez por L. Díaz (E); 18m. Benjamín Rollheiser por Piatti (E); 26m. Julio Buffarini por Pizzini y Ulises Ortegoza por Garro (T); 36m. José Romero por Santos (T); Leonardo Heredia por Boselli y Franco Zapiola por Castro (E).

Amonestados: Leandro Díaz, Morel, Jorge Rodríguez y Rogel (E)

Árbitro: Nicolás Lamolina.

VAR: Yael Falcón Pérez.