La Iglesia de San Benjamín fue el segundo templo de La Plata

Su creación respondió a las necesidades religiosas de la gran cantidad de trabajadores extranjeros, en su mayoría italianos, españoles y portugueses, que se desempeñaban en los hornos de ladrillos que edificaron a nuestra ciudad

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Cuando la flamante ciudad de La Plata contaba solamente con la Iglesia de San Ponciano, creada el 12 de junio de 1883, las numerosas edificaciones de enormes edificios públicos que iban teniendo lugar demandaban grandes cantidades de ladrillos que eran elaborados fuera del casco fundacional, en una zona del sector oeste en donde se habían establecidos los primeros hornos para la fabricación de ese insumo fundamental para la construcción en mampostería.

Allí, en la barriada que rápidamente tomaría el nombre de Los Hornos, se habían afincado obreros extranjeros que eran especialistas en la elaboración de ladrillos. Esta población fue creciendo a un ritmo vertiginoso y, así, se conformó un núcleo social muy religioso, una de cuyas demandas principales era de la contar con un templo católico.

Esa necesidad fue respondida por el entonces gobernador bonaerense electo, Benjamín del Castillo, y su esposa Jacoba Ramiro en Los Hornos, quienes el 6 de septiembre de 1885 donaron un predio en 57 y 140, cuyas características eran cuadrangulares con lados de 120 metros de longitud cada uno.

El 23 de ese mismo mes comenzó a edificarse una sencilla pero acogedora capilla, a partir de los donativos que para la construcción iban haciendo las familias de los trabajadores hornenses.

La construcción se realizó por etapas, a medida que se recaudaban fondos para cada parte de la obra. Cada vez que se obtenían los recursos necesarios para nuevos trabajos, se erigía un sector adicional del templo. Finalmente, el templo completo fue inaugurado el 7 de septiembre de 1890.

A lo largo de las tres primeras décadas, en la capilla de San Benjamín oficiaron misas y celebraron otras numerosas festividades religiosas muchos sacerdotes, entre ellos el presbítero Manuel Gallardo y el canónico Enrique Gambier, cuyo nombre le fue impuesto a la cercana estación del ex Ferrocarril Provincial.

EL PADRE STOLFI

Cuando el 16 de octubre de 1949, el obispo Tomás Solari designó como parroquia a la capilla de San Benjamín, puso al frente del templo al carismático y humilde sacerdote italiano Antonio Luis Stolfi, quien de inmediato se ganó el cariño de los feligreses.

La gran actividad social, cultural y religiosa que encabezó el padre Stolfi en torno al templo tuvo una directa relación con el crecimiento urbano de Los Hornos.

El padre Stolfi construyó el salón de actos, para que los vecinos pudieran reunirse y además disfrutar de su primera sala de cine. El sacerdote era docente y muchas veces él mismo se encargaba de escribir y dirigir las obras teatrales que se representaban en dicho salón parroquial.

Las peñas folclóricas, las fogatas de San Juan y las tradicionales kermeses, como también las reuniones familiares con comida a la canasta, iban a transformase en una tradición en San Benjamín.

El 6 de agosto de 1950, Stolfi publicó por primera vez el semanario “Surge” cuya dirección estuvo a su cargo; este medio fue cobrando cada vez más impulso y muchos años después, en 1984, fue galardonado con el premio San Gabriel y en el 2007 con el premio Santa Clara de Asís.

 

141º Aniversario de la ciudad de La Plata
San Benjamín

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