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Policiales |La inseguridad en la zona sigue latente

El Mondongo, caliente: persecución policial, detenidos y heridos

Sucedió en 116 entre 63 y 64. Desconcierto y estupor entre los vecinos, que temieron un incidente con armas. La Policía informó que hubo un arresto de tres sospechosos, por el cual dos efectivos resultaron lesionados

El Mondongo, caliente: persecución policial, detenidos y heridos

la cuadra de 116 entre 63 y 64, donde se produjo el revuelo por el procedimiento policial / gonzalo calvelo

31 de Marzo de 2023 | 02:58
Edición impresa

Distintas versiones y mucha confusión generó, en la tarde de ayer, un violento episodio ocurrido en plena vía pública de un sector del barrio El Mondongo.

El incidente se produjo en la calle 116 entre 63 y 64, donde inicialmente circuló la hipótesis de un supuesto asalto callejero, donde un vecino había resultado herido de bala tras un forcejeo con un delincuente.

Inclusive, algunos frentistas le informaron posteriormente a este diario que escucharon “los gritos de una mujer, que solicitaba ayuda”.

En ese sentido, se citó que, pocos minutos después, la cuadra se vio colmada de móviles y efectivos policiales.

En medio de una gran conmoción, contrariamente a lo que suele ocurrir en esta clase de episodios, toda la escena se disipó en apenas un rato.

Por eso, los frentistas consultados por este diario aseguraron no tener precisiones sobre lo acontecido, aunque volvieron a evidenciar mucho temor por la inseguridad.

“Sabemos que algo pasó, pero no tenemos en claro cómo se dieron los hechos ni por qué motivo”, le dijo, por caso, un matrimonio que vive en la cuadra.

SOSPECHOSOS EN MOTO

Sin embargo, horas después la Policía de esa jurisdicción clarificó todo con la difusión de un reporte del caso.

Al respecto, se informó que “en recorrida de un móvil policial por la jurisdicción, se observó en 116, de 63 a 64, a dos motos con un ocupante en cada una, circulando en contramano, y que, al ver la presencia policial, giraron en “U” y comenzaron a huir a toda velocidad”.

Enseguida se indicó que “al sospechar de la comisión de algún ilícito, se comenzó una breve persecución”.

Así, “se les dio alcance a 200 metros del lugar donde intentaban ingresar en un domicilio, de 116 entre 63 y 64”, consignaron los informantes.

En el texto se subrayó después que los efectivos “trataron de demorarlos en su fuga, oponiendo ambos motociclistas cierta resistencia, al negarse a ser identificados y trataron de atacar al personal actuante”.

Paralelamente, se subrayó que la intempestiva actitud de los sospechosos se mantuvo “hasta la llegada del apoyo policial, con lo cual se logró su detención”.

Siempre en base a lo comunicado por los mismos voceros, cuando parecía que el procedimiento había finalizado con esos arrestos, surgió un imponderable.

En tal sentido, se sostuvo que en ese momento “salió de su vivienda una mujer (de esa cuadra), refiriendo ser la progenitora de los aprehendidos”.

Según lo consignado en el parte oficial, la vecina en cuestión “golpeó a los oficiales que participaban del procedimiento (una teniente primero y una oficial ), por lo que se dispuso su detención”.

En cuanto al personal policial agredido, se precisó que “poseen lesiones por rasguños propios del forcejeo”, aunque se aclaró que de todas maneras los oficiales atacados optaron por “no instar acción penal”.

Seguidamente, se reflejó que tanto los dos motociclistas, uno de ellos de 27 años y el restante de 28, como la madre, de 46, fueron trasladados por a la comisaría novena.

Allí les instruyeron actuaciones caratuladas como “resistencia a la autoridad y lesiones”.

Pero además, les incautaron las motos en las que se movilizaban, detallándose que se trataban de un Motomel Skcua y una Gilera Smash, no especificándose otros datos sobre ambos rodados.

Vale señalar que se dio intervención por el hecho también a la UFI Nº 2 de La Plata.

“ME ASOMÉ POR LOS GRITOS”

Entre los muchos residentes del barrio que permanecían intrigados por el episodio en cuestión, se encontraba Brenda (21).

Así se lo hizo saber a EL DIA, como también lo que pudo observar en torno a lo sucedido a unos 70 metros de su vivienda.

“Eran las 4 menos diez (de la tarde) cuando estando en casa escuché gritos que provenían de la calle”, citó inicialmente.

Intrigada por la situación, reveló que “me asomé por la ventana que da a la calle y ahí vi a dos hombres que estaban forcejeando y que parecían entrar a una casa”.

“Luego sentí gritos de ayuda de una mujer. A los 5 minutos, se llenó de policías y vecinos. No sé qué pasó”, concluyó.

 

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