El pan también se va para arriba: 15 por ciento

Un gran número de panaderías de la Región mantiene el precio del pan, pese al alza de la harina subsidiada. Sin embargo, los comerciantes del rubro advierten que ese alimento básico en los hogares argentinos podría incrementarse un 15 por ciento en las próximas semanas.

Hugo Natale, dirigente de la Asociación de Panaderos del Gran La Plata, asegura que el pan sigue la línea de actualización de la mayoría de las cosas. Indica que se vende entre 400 y 550 pesos el kilo, según los barrios, pero apunta que es posible encontrarlo a menor precio.

Con relación a la próxima Semana Santa opina que la mayoría de los panaderos espera tener buena venta de productos de fabricación propia como es el caso de las Roscas. Las de medio kilo se venderán entre 800 y 1.100 pesos.

“El panorama es similar en todo el Gran Buenos Aires, pero se cree que el pan subirá hasta un 15 por ciento”, asegura el dirigente.

En la semana que termina, la Secretaría de Comercio fijó un incremento del 3,2 por ciento en la harina subsidiada por medio del Fondo Estabilizador del Trigo Argentino y los panaderos advirtieron que eso se trasladaría a los precios finales. En ese marco, se afirma que el pan podría subir alrededor de un 15 por ciento en los próximos días.

A través de la resolución 269, publicada en el Boletín Oficial, el Gobierno estableció los nuevos valores para la harina. De esta manera, las bolsas de 25 kilogramos quedaron en 1.764 pesos para la harina 000 y en 2.117 pesos para el tipo 0000; en tanto para la misma cantidad de la harina tapera y semolín se fijó en 2.293 pesos.

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Los panaderos aseguran que no solo se trata del precio de la harina, sino de todas las materias primas con las que elaboran sus productos. Ponen como ejemplo que el cajón de huevos sale 13.500 pesos y una caja de margarina 13.000 pesos.

En una panadería de avenida de 7 al 800 se informa que el pan está 400 pesos el kilo y así se mantendrá por el momento. “Lo aumentamos el mes pasado, por ahora lo mantenemos a ese precio, al igual que la docena de facturas a 1.100 pesos”, aclara la empleada de ese local. También lo vende a 400 pesos el kilo una panadería de calle 10 al 400.

Pero esa no es una política uniforme en toda la Región. “Hoy - por ayer - está a 450 pesos el kilo, pero mañana - por hoy - lo subimos a 520 pesos por el aumento que tuvieron todos los insumos”, refiere un panadero de calle 59 al 600.

También se observa una gran disparidad de precios según los comercios.

En un supermercado de calle 17 y 47 el kilo de pan se vende a 300 pesos y en una cadena de panaderías de calle 12 al 1000, el kilo de pan pre cocido sale 1000 pesos.

“Son los que vienen congelados y nosotros los horneamos”, apunta la empleada y aclara que es el único tipo de pan que se vende.

Carlos Proia, dueño de una panadería cercana a la Estación de Micros, advierte que hasta que no le llegue la harina con aumento tratará de mantener el precio del pan para no perjudicar a sus clientes.

“Todo está complicado, no hay semana que no aumente la materia prima; lo que más subió fue la levadura y la margarina”, explica el comerciante.

Como era de esperarse también subieron todos los ingredientes con los que se elabora la rosca de Pascua y esta temporada las venderá a 1.500 pesos.

“Le doy un precio para que se pueda vender, está muy caído el poder adquisitivo de la gente”, apunta Proia.

En ese comercio el kilo de pan se vende a 450 pesos y cree que por aumento de costos se podría ir a alrededor de 500 pesos en las próximas semanas.

En relación a las empanadas de vigilia se calcula que debería venderse a 500 pesos por unidad.

“La sequía también impacta en el precio de la harina y eso se traslada a los productos”, concluye el panadero.

En otra panadería cercana a plaza Yrigoyen se informa que el pan se mantiene a 500 pesos el kilo y no se cree que aumente en las próximas semanas.

“Estamos tratando de mantener ese valor lo que más se pueda para evitar el colapso de la gente en cuestiones tan sensibles como es llevar el pan a la mesa”, dice el panadero consultado.

No obstante, reconoce el malestar que hay en el sector a raíz del constante aumento de las materias primas.