Messi, contra el césped: “Se hizo muy díficil jugar”

Una de las grandes noticias que tuvo Argentina en el empate ante Venezuela, fue el regreso de Lionel Messi. Tras casi tres meses, el capitán volvió a jugar con la Scaloneta luego de sufrir una lesión ligamentaria en el tobillo derecho. Más allá de dejar en claro que el partido se hizo difícil por la cantidad de agua que hubo en el campo de juego del Monumental de Maturín, se mostró feliz por volver a jugar con la Selección.

“Se hizo muy difícil jugar y salió un partido muy feo, muy trabado. No podíamos dar dos pases seguidos. En el segundo tiempo, por derecha, por ahí pudimos jugar un poco más. Pero es difícil jugar así, porque se juega muy poco”.

Sobre lo que fue el desarrollo del juego, enfatizó: “Empatamos porque la cancha no nos dejó hacer lo que nosotros queremos hacer. Y salió un partido que no habíamos preparado. Pero si estuvimos preparados para el contexto, de luchar la pelota, de ganar los duelos y de jugar con el error del rival. De no arriesgar mucho nosotros, porque no podíamos dar pases atrás, porque el agua la paraba. Hicimos el partido que teníamos que hacer por la cancha”.

Con respecto a su regreso, Messi se mostró contento: “Se hizo larga la espera de volver a jugar. La verdad que fue mucho tiempo afuera y me perdí muchos partidos en el club. Estoy contento de volver, de seguir teniendo continuidad y de estar otra vez acá”.

Además aclaró por qué no estuvo en la doble fecha de Eliminatorias de septiembre: “En la convocatoria anterior, había entrenado poco y todavía no estaba al 100 por ciento en el tobillo, porque me molestaba. Fue todo muy normal y decidimos con Lionel (Scaloni) que no estaba para jugar y que lo mejor era que siguiera entrenando”.

Sobre lo que será el partido ante Bolivia del próximo martes, en el Monumental, dejó en claro: “Me pone muy feliz y extraño jugar en Argentina. Vamos a tener un par de días para descansar y para preparar el partido de local”.

EL PARTIDO DEL CAPITÁN

Lionel Messi completó todo el encuentro en el empate ante Venezuela y si bien mostró su jerarquía en algunos tramos del juego, el estado del campo le impidió jugar en plenitud. En la primera parte, tuvo algunos destellos, pero después tuvo que bajar demasiado al mediocampo, ya que no le llegaba la pelota.

Con una pincelada en un tiro libre, generó el mal despeje del arquero para el gol de Nicolás Otamendi. Después luchó cada pelota como si fuera la última, pero no estuvo preciso.

En el complemento, con un césped que mejoró un poco, se volcó por derecha y pudo hacer algunas de las suyas. Dio algunos buenos pases y hasta tuvo una chance clara, que pudo haberle dado la victoria a Argentina: tras un pase milimétrico de De Paul, Messi encaró dentro del área, pero remató suave ante la salida del arquero Romo, que lo anticipó.

Después se mostró molesto con algunas decisiones del árbitro uruguayo, Gustavo Tejera, sobre todo por algunas faltas en contra. También, por los charcos de agua que hubo en la cancha, que le impidieron al equipo tener un juego fluido. Más allá de todo, Leo tendrá su reencuentro con la hinchada argentina, el próximo martes ante Bolivia.

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