El Madrid venció al Dortmund y volvió a subirse a la cima como Rey de Europa

El Real Madrid sacó a relucir su historia, su chapa y todo su potencial copero y se consagró nuevamente campeón de la Champions League tras vencer en la final al Borussia Dortmund por 2 a 0, en Wembley, para así lograr su decimoquinto trofeo de Europa.

El defensor Dani Carvajal, a los 38 minutos del complemento, y el brasileño Vinicius Jr., a los 37 del mismo período, fueron los artífices del delirio total del cuadro Merengue.

El encuentro comenzó con una insólita invasión por parte de tres fanáticos al campo de juego, lo que llevó a que el árbitro tuviera que detener las acciones de un colmado estadio inglés, lo que llevó a una demora de casi cuatro minutos.

En la reanudación, lo exhibido por ambos equipos estuvo muy lejos de los que se imaginaba en la previa, ya que centraron el juego en una batalla en el mediocampo, en la que ninguno logró sobresalir por encima del otro.

Pero con el correr de los minutos, fue el Borussia Dortmund el que logró romper la paridad en cuanto al juego, y acechó a un Real Madrid que tuvo que depender de la destaca labor de su arquero, el belga Thibaut Courtois, quien le ahogó el grito de gol a Karim Adeyemi y luego a Marcel Sahitzer. Otra vez, como en los últimos tiempos, al Real lo tuvieron a tiro. Sin embargo, casi una constante, lo dejaron con vida y no perdonó.

Igualmente, el arquero belga no pudo siempre responder de grata manera. Sin embargo, cuando no logró hacerlo, la fortuna estuvo del lado de los de Ancelotti, un tocado por el destino. En una de las más claras para los alemanes, Niclas Füllkrug remató, pero el poste le negó la posibilidad de irse al descanso arriba, con un triunfo parcial muy parecido a la justicia.

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En el complemento, Real Madrid salió con otra determinación y dejó en claro los antecedentes que lo acompañan. Con un juego auspicioso y punzante, contó con una doble acción: primero con un tiro libre del siempre elegante Toni Kroos y, luego con un cabezazo de Carvajal. Avisos de lo que más tarde llegaría en Wembley.

El Dortmund respondió con un potente cabezazo de Füllkrug, pero esto fue apenas un oasis para los de Alemania, ya que el cuadro Merengue dominó todas las acciones en la segunda mitad.

Luego de varios intentos, Carvajal ganó de cabeza en el área rival, una vez más y, mandó la pelota al fondo del arco para firmar el 1 a 0 a favor de un Real Madrid que ya se mostraba ampliamente superior a su rival.

El desconcierto se adueñó del Dortmund y los de Terzic lo pagaron carísimo: en una mala salida en defensa, el picante Vinicius aprovechó para definir ante el achique del arquero Kobel y así sentenciar el 2-0 definitivo.

Sobre el cierre del partido, Füllkrug logró el descuento, pero la acción fue invalidada por posición adelantada. Nada pudo hacer el cuadro de Alemania para evitar la derrota.

El esloveno Slavko Vincic, de correcta tarea, pitó el final y desató la alegría de toda la Casablanca. El Real Madrid, que siempre está en la etapa decisiva sin importar los nombres ni los estilos de juego, lo hizo nuevamente.

Con el ya mítico Carlo Ancelotti al frente del plantel y esa forma tan suya de manejar de formas iguales talento, juventud, experiencia y egos, el Merengue se coronó como el mejor de Europa una vez. Fue la decimoquinta dentro de su tremenda y rica historia, muy por encima de cualquier del Viejo Continente y del Mundo que pretenda sentarse en la misma mesa.