Boca lo dio vuelta: revivió en el segundo tiempo

En lo que terminó siendo un partido muy intenso y entretenido, Boca le ganó 3-2 a San Lorenzo por la undécima fecha de la Liga Profesional y pegó un buen salto en la tabla de posiciones que clasificará al nuevo campeón del fútbol argentino y a los clubes que representarán al país el año que viene en la Copa Libertadores y la Copa Sudamericana.

Andrés Vombergar e Iván Leguizamón anotaron para los de Boedo, mientras que los goles del Xeneize los hicieron el uruguayo Marcelo Saracchi, quien terminó siendo expulsado en el final por doble amonestación, Milton Giménez y Miguel Merentiel.

El partido que se disputó en el estadio Alberto J. Armando, más conocido como la Bombonera, había comenzado muy complicado para Boca, que pese a dominar en el desarrollo del juego se vio en desventaja a los 20 minutos del primer tiempo por un tanto de penal asegurado por Vombergar, luego de que el árbitro Pablo Echavarría cobrara la pena máxima tras una mano de Marcos Rojo.

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El conjunto azul y oro terminó el primer tiempo muy desconcertado y teniendo que conformarse con estar por sólo un gol en desventaja en medio de un clima muy tenso que bajó desde las tribunas.

En el complemento, los ingresos del lateral Luis Advíncula, el mediocampista Cristian Medina y el delantero Miguel Merentiel le cambiaron totalmente la imagen a Boca, que empezó a dominar rápidamente el encuentro.

Así fue como en una ráfaga letal Boca lo dio vuelta. Primero a través de Giménez, a los 5 minutos del segundo tiempo, que definió con una muy buena pirueta en el área chica del Ciclón, y sólo cuatro minutos después, cuando Saracchi desbordó y remató al primer palo del arco defendido por Facundo Altamirano, que no pudo hacer nada para evitar el gol de sus rivales.

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Se despertó a tiempo y piensa en Cruzeiro

Boca liquidó el encuentro con un gol en el tiempo cumplido del también uruguayo Merentiel, que definió muy bien tras quedar mano a mano con Altamirano, y San Lorenzo pudo descontar en el último minuto otra vez de penal, pero con Leguizamón como ejecutor en esta ocasión.

Con este triunfo, Boca alcanzó la línea demarcada por 17 unidades y quedó mejor posicionado con respecto a los equipos más productivos del certamen cuyo ganador, en diciembre, deberá cruzarse con el Estudiantes en diciembre próximo, con otra copa en disputa.

Diego Martínez puso en cancha una formación alternativa, dándole prioridad a la revancha del jueves como visitante de Cruzeiro, en Brasil, por los octavos de final de la Copa Sudamericana, con los riesgos que eso presupone.

Boca ganó y quedó bien posicionado en todos los frentes, pero atención porque su producción, particularmente a lo largo del primer tiempo, estuvo por debajo de las expectativas, al punto que para el segundo tiempo hubo cambios que le cambiaron la cara.

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Entraron Luis Advíncula, Miguel Merentiel y Cristian Medina, quienes serán titulares en Belo Horizonte, y con ellos en cancha Boca cambio de actitud y empezó a dar vuelta un partido plagado de polémicas, como un cruce abajo de Leandro Brey a Vombergar, que el árbitro dejó pasar.

El triple cambio que puso en cancha a tres jugadores que asoman como titulares para la revancha, marcó la salida de Marcos Rojo, probablemente titular en la revancha con Cruzeiro, Ignacio Miramón, quien tuvo un debut poco significativo en el club que lo repatrió como reemplazante de Ezequiel “Equi” Fernández, y Exequiel Zeballos, que no puede recuperar su mejor nivel tras dejar atrás una grave lesión.

Las variantes le cambiaron la cara por completo al equipo, que fue una versión muy mejorada en la segunda parte, al punto que en una ráfaga dio vuelta el partido a través de Giménez, con asistencia de Aaron Anselmino, y Saracchi, con la ayuda de un desvío cuando sacó el centro.

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El equipo de Leandro Romagnoli, quien en la primera etapa pudo ampliar la diferencia, porque más allá de la entrada de Vombergar que se reclamó como penal, tuvo situaciones apropiadas para aumentar, acusó el golpe y no tuvo reacción.

Con el tiempo cumplido, Anselmino volvió a asistir, en este caso a Merentiel, quien definió muy bien, estableciendo el 3-1 que se acortó en el descuento cuando Saracchi cometió una infracción en el área, que le costó la expulsión por doble amarilla, y Leguizamón estampó el 3-2 definitivo convirtiendo el penal que Pablo Echavarría cobró tras certificación del VAR.

Este resultado va a repercutir en el ánimo de ambos planteles en dirección a los cruces frente a Atlético Mineiro, en el caso de San Lorenzo, que empezó la llave de octavos de la Copa Libertadores con un empate de local, y Cruzeiro, considerando la actualidad de Boca, quien defenderá en Brasil la ventaja de un gol lograda en su cancha por la Copa Sudamericana.

Después de estos cruces, los Xeneizes serán visitantes de Estudiantes y los azulgranas locales de Talleres.