Último adiós a Mateo y un clamor por su crimen
Edición Impresa | 16 de Enero de 2025 | 02:49

Mientras perdura en toda la Ciudad la conmoción y el repudio, inclusive en las redes sociales, por el salvaje asesinato de Mateo Yagame (18), familiares y amigos informaron que está previsto que mañana se realicen dos marchas para reclamar justicia.
Una de las movilizaciones se hará en Los Hornos -donde la víctima vivía junto a su madre y tres hermanos menores de edad- y la restante frente a la Gobernación bonaerense.
Como lo viene informando este diario, el ataque mortal a Mateo se produjo en la calurosa tarde del sábado último. Previamente, su madre había llegado de trabajar a su casa de las calles 153 y 76, en la que ahora reside con sus hijos de 16, 15 y 3 años. El segundo de ellos, le pidió de ir comprar un jugo a un kiosco que está a pocos metros de esa vivienda.
Según lo informado por fuentes del caso, el chico salió con su celular, pero antes de que llegara a destino fue abordado por un grupo de jóvenes, quienes intentaron robarle el teléfono.
“DEFENDIÓ A SU HERMANO”
Rápidamente volvió a su casa y relató lo sucedido, por lo que Mateo -el mayor de los cuatro hermanos- fue hasta donde estaban los sospechosos y les recriminó el incidente. Uno de los investigadores aseguró que “hubo una fuerte discusión y cruzaron insultos. Estaba en desventaja numérica con esos pibes. Pero defendió al hermano”.
Ayer a la tarde, Claudia, abuela de Mateo, le dijo a EL DIA que “mi nieto de 15 años estaba con Mateo y le avisó que uno de la bandita, que tiene 14 años, lo perseguía con un cuchillo. Pero antes que Mateo reaccionara, lo atravesó de lado a lado. La puñalada fue en la zona baja de la espalda, a traición”.
“Mateo entró corriendo a la casa y le pidió ayuda a la madre, que le hizo un torniquete para que no perdiera más sangre. Luego un vecino lo llevó en su auto al hospital San Martín, donde le hicieron transfusiones de sangre, pero lo complicó mucho que la puñalada le cortó la arteria femoral. Lo operaron durante más de tres horas, pero el domingo a la mañana tenía muerte cerebral y a la noche nos avisaron que falleció”, recordó acongojada.
“QUIEN MATA, TIENE QUE PAGAR”
La familia de Mateo, pese al lacerante dolor que la embarga, tras velar anoche al infortunado joven y participar esta mañana de la ceremonia de su sepultura, tiene decidido abocarse a demandar justicia.
“El día lunes a las 10 hs en Plaza Moreno nos juntamos a marchar, los esperamos. Hoy por Mateo y espero que nunca más por nadie”, remarcó. Cabe resaltar que por su edad, el acusado es inimputable y ya fue liberado. “La jueza María José Lescano lo liberó. Pero queremos que se libre su orden de detención”, dijeron.
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