La angustia de un periodista, al que se le hizo “un nudo en la garganta”

El periodista José Fulgonio, con años de movilero y miles de coberturas para las señales TN y Canal 13, se quebró en llanto ayer, mientras realizaba un móvil televisivo, en vivo, en la puerta de los tribunales penales de La Plata.

El episodio ocurrió cuando el reconocido cronista del programa “La primera mañana” -de la señal de cable-, se encontraba entre la multitud, describiendo los movimientos del padre de Kim, Marcos Gómez, que acababa de llegar a la sede judicial.

En ese instante, al verlo con los juguetes de su hija, paró de hablar.

“El papá está entrando a la audiencia, con el peluche de la capibara, es un peluche también, un unicornio, los juguetes de la nena y ahí entra entonces acompañado de su hermana y otro allegado a presenciar esta audiencia”, narró Fulgonio, con un nudo en la garganta.

Entonces, el conductor del programa, Mario Massaccesi, se pegó a la palabra de su compañero y le dijo: “¿Qué te pasa, Fulu? salite de la crónica, ¿Qué te pasa a vos?”.

“Me pasa, Mario, que tengo una hija casi de la misma edad, que juega con los mismos juguetes”, contestó el movilero. “El último peluche que le compré a mi nena también era un peluche de capibara y es imposible no ponerse en el lugar de este papá”, agregó entre sollozos. Luego, hubo un silencio.

Minutos después, Fulgonio se recompuso e intentó continuar con su tarea. “Veremos qué pasa con este caso particular, en el cual los dos detenidos fueron detenidos inmediatamente, ya en el peritaje judicial se confirmó el deceso de la nena, y además los agravantes de la forma terrible, bestial, que le quitaron la vida a esta chiquita” narró, con la voz entrecortada por la emoción.

Ante esta situación, Massaccesi intervino nuevamente: “Te voy a salvar un cachito, porque está haciendo un esfuerzo gigante Fulgonio para seguir, no se quiebra nunca, tiene años en la calle. Nunca te vimos así, y está todas las mañanas en TN y en Canal Trece”. Y, además, agregó: “Pero hay un día, en el que la crónica se interrumpe porque somos seres humanos”.