La fumata blanca despertó el júbilo de la multitud en la Plaza de San Pedro

Una multitud de varios miles de personas congregadas en la plaza de San Pedro del Vaticano rompió en aplausos y vítores tras la aparición de la fumata blanca que anunció la elección de un nuevo papa, quien tendrá la misión de suceder a Francisco.

Las campanas de la basílica de San Pedro sonaron con fuerza poco después de que apareciera la fumata blanca en la chimenea del tejado de la Capilla Sixtina, hacia las 18:08 de Roma.

Miles de personas se concentraron este jueves en la plaza de San Pedro con la esperanza de ver humo blanco sobre la Capilla Sixtina, que finalmente anunció al mundo la elección de un nuevo papa.

"Estuve aquí anoche, esta mañana y ahora. No me iré hasta que no haya humo blanco", aseguró a AFP Pedro Moreira de Almeida, un brasileño de 38 años que viajó desde España, donde reside, a Roma para la ocasión.

Según las indicaciones facilitadas por el Vaticano antes del cónclave, los cardenales habrían votado en cuatro ocasiones hasta la tarde. Más temprano una fumata negra había generado algo de decepción entre los fieles.

Hasta la elección del sucesor del primer papa latinoamericano, fallecido el 21 de abril a los 88 años, los "príncipes de la Iglesia" celebraron tres rondas de votación.

El cónclave se reanudó a las 16:00 de Roma con la cuarta votación.

Los dos últimos cónclaves, que llevaron a la elección de Benedicto XVI en 2005 y al primer papa latinoamericano en 2013, se resolvieron en sólo dos días, con 4 y 5 rondas de votación respectivamente.

Pero la decisión de los purpurados, guiados según la tradición por el Espíritu Santo, pareció esta vez más complicada.

La mayoría estuvo en 89 votos, correspondientes a los dos tercios de los sufragios. 

Una vez alcanzado el número, las papeletas de votación se quemaron en una estufa y se añadieron productos químicos para blanquear el humo. Lo mismo sucedió en las fumatas negras junto a sustancias que ennegrecieron la humareda.

En la jornada de hoy la gente se protegía del sol con banderas y paraguas, algunos sentados por el suelo ante lo que fue una larga espera.