Otra cumbre de gobernadores y escala la tensión con la Rosada

Aquejados por la baja de la recaudación, el recorte de los fondos coparticipables por parte de la Nación, el freno de la obra pública y la caída en el consumo, el comercio y la industria, los gobernadores volverán a reunirse hoy en las oficinas porteñas del Consejo Federal de Inversiones (CFI), donde esperan repasar la situación de cada provincia y avanzar con sus reclamos, en un momento de particular tensión con la Casa Rosada.

En la previa, trascendió que el Ejecutivo le ofreció una suerte de canje a los mandatarios: fondos frescos a cambio de que las provincias se hagan cargo de las obras de Vialidad en sus propios distritos.

Esa fue la respuesta del Gobierno al pedido, por parte de los mandatarios provinciales, de elevar la coparticipación del impuesto a los combustibles al 50% y regularizar el envío de fondos a través de Aportes del Tesoro Nacional (ATN).

En este marco, en la Casa Rosada aceptaron ceder el porcentaje de la recaudación del tributo destinado al Sistema Vial Integrado, que el año pasado registró $674.627 millones a través de la vía impositiva y recibió transferencias por más de un billón de pesos.

“NO PUEDE GOBERNAR SOLO”

La idea de los gobernadores era exponerle sus demandas a Milei cara a cara, pero eso no pudo ser por la gira presidencial por Europa e Israel. Entonces, fue el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, quien junto a su número dos, Lisandro Catalán, y el secretario de Hacienda, Carlos Guberman, recibió a Sergio Ziliotto (La Pampa), Claudio Vidal (Santa Cruz), Raúl Jalil (Catamarca), Ignacio Torres (Chubut) y a Myrian Prunotto, vicegobernadora de Córdoba.

Si bien se avanzó con algunos de los reclamos, esa cumbre no alcanzó para aliviar tensiones como las que dejó de manifiesto el tucumano Osvaldo Jaldo, uno de los peronistas aliados a Milei que, sin embargo, protestó: “La Nación tiene que tener un diálogo más profundo con las provincias”.

“El Gobierno Nacional tiene que entender que solo no va a poder gobernar. Necesita el acompañamiento de las provincias, de la misma manera que necesitamos el acompañamiento del Gobierno Nacional”, enfatizó Jaldo y advirtió: “A la Nación le tiene que ir bien, pero con las provincias incluidas. Que el Presidente no pretenda que le vaya bien al Gobierno nacional y a los 23, 24 distritos del interior, nos vaya mal. No va a poder gobernar si no lo hace con los gobernadores. Que no se equivoque”.

Y adelantó sobre la reunión de hoy: “Vamos a llevar casos concretos de actividades productivas, industriales y comerciales que se van cerrando, que van dejando a gente sin trabajo o adelantando vacaciones. Vamos a hablar no solo del Estado provincial, sino también de la actividad privada. Al paso que vamos, va a haber un costo social muy importante si el Gobierno nacional no reacciona en tiempo y en forma”.