“Las alertas son cada vez más frecuentes”

Las alertas meteorológicas son cada vez más frecuentes y es cada vez más común que se trate de alertas de corto plazo (que deben comunicarse dentro de las tres horas de haberse emitido), según indicó a este diario Angela Pérsico, coordinadora del área de Planificación del Comité Operativo de Emergencia Municipal.

Pérsico indica que desde el año 2008 la ciudad cuenta con un protocolo de respuesta ante las emergencias meteorológicas, que establece pautas a seguir por los organismos involucrados y que la conciencia de la población frente a estos fenómenos es actualmente mayor que años atrás.

Con todo, admite que, ante el crecimiento de la virulencia de los fenómenos “aunque estamos siguiendo permanentemente los datos emitidos por el Servicio Meteorológico Nacional y servicios meteorológicos privados hay fenómenos que se forman con tal rapidez que resultan muy difíciles de prever”.

MALAS PRAXIS Y ZONAS DE RIESGO

Pérsico destacó que “el hecho de que el vecino tenga más conciencia hoy de los peligros del clima ha permitido reducir algunas malas praxis vecinales, como el arrojar basura a los arroyos.

Pero sigue habiendo en la ciudad zonas que son de alto riesgo frente a los fenómenos climáticos. Zonas bajas y anegadizas, donde los peligros que plantea el clima se potencian”.

Según la funcionaria, “la ciudad no sólo cuenta con ese tipo de zonas, sino que está cruzada por un gran número de arroyos y las orillas de esos arroyos son también lugares de riesgo donde se tienen que extremar las precauciones frente a las tormentas”.

Para esos sitios más vulnerables, según indicó Pérsico, no sólo se tienen en cuenta los protocolos de emergencia, sino también se está trabajando junto a la Provincia en obras para minimizar los riesgos.

CONCIENTIZACION

Al mismo tiempo, se destacó que se trabaja en la educación de los vecinos, un concepto que se considera clave para contrarrestar las amenazas del clima.

Por otra parte, los tiempos proveen nuevas herramientas para difundir las alertas.

Entre ellas se destaca el papel de las redes sociales, que ya se utilizan para prevenir sobre la llegada de tormentas.