Más que una botinera

Wanda Nara parece por momentos una consumidora sin límites que aprovecha los millones que cobra su nuevo marido, Mauro Icardi (quien reemplazó a su primer marido-jugador, el avejentado y menos cotizado Maxi López, con quien protagonizan una cruenta guerra judicial).

Y sin embargo, ahora ha emergido una nueva faceta de la “botirreina”: no sólo los gasta, sino que también los genera. Nara es la nueva representante de Icardi, uno de los jugadores más caros de Europa, que se distanció recientemente de su representante tras 10 años de vínculo.

Así lo confirmó Abain Moreno, quien fuera el representante, en una entrevista reciente: contó que fue despedido y desplazado del cargo. Según las propias palabras del manager, Wanda maneja el 100% de las negociaciones de la joven estrella de 22 años.

La propia botinera se encargó de avalar la información a través de su cuenta oficial de Twitter. Fiel usuaria de las redes sociales, la blonda retuiteó una noticia sobre sus flamantes responsabilidades al frente de la carrera futbolística de su marido.

PRIMERAS ARMAS

¿Error capital de Icardi? A primera vista, no: Wanda ya había participado de las negociaciones para el nuevo contrato del joven delantero con el Inter de Milán, luego de que, durante meses, las charlas estuvieran trabadas.

“Todos ironizan, pero Wanda fue más pragmática que aquellos que trabajaron por la renovación durante meses creando caos: claridad y acuerdo”, halagó el periodista Frabrizio Romano a la “botirreina”, cuando consiguió finalmente lo que su marido quería: un contrato de estrella.

Lo curioso es que Wanda, lejos de pedir menos para ablandar a los directivos del cuadro de Milán... ¡consiguió más! Su representante no pudo cerrar 3 millones de euros por año, mientras que Nara, que empujó para el despido de Moreno, consiguió 4,2 millones de euros, además de varios beneficios. ¿La contratará algún otro jugador?