El FpV se encamina al “festival” de boletas

En el Frente para la Victoria va ganando adeptos la idea del “todos con todos”. Encumbrados dirigentes bonaerenses empezaron a blanquear el proyecto que, tal como adelantara este diario, derivaría en la aparición de una multiplicidad de listas oficialistas en el cuarto oscuro durante las Primarias.

El esquema que se está delineando en el oficialismo se traduce de la siguiente forma: que los dos o tres aspirantes a la Casa Rosada que habilite el universo K, sean autorizados a llevar en sus boletas a todos aquellos que queden en carrera para la pelea por la Gobernación.

No sólo eso: ese efecto multiplicador de listas se trasladaría a los distritos, donde se permitiría que, donde haya internas, los precandidatos a intendente puedan ir atados a todos y cada uno de los gobernadores y presidenciales.

En el oficialismo aseguran que esa alquimia que inundaría las mesas de votación de listas con el sello K, está permitida por ley y que, por lo tanto, podría plasmarse tranquilamente sin temor a tener que afrontar planteos judiciales.

Hay otra cuestión adicional: el “todos con todos” podría terminar beneficiado a las listas de legisladores nacionales y provinciales, ya que en esas categorías el FpV no habilitará internas. Esas ofertas únicas terminarán como tributarias del abanico de ofertas presidenciales y a gobernador.

Algunos dirigentes ya comparan esta posibilidad con lo que ocurrió en 2011, cuando en la Provincia el FpV habilitó dos listas de candidatos a gobernador, una encabezada por Scioli y la otra por el actual titular del Afsca, Martín Sabbatella.

La gran beneficiaria de esa dicotomía oficialista fue entonces Cristina Fernández de Kirchner, quien cosechó por las dos canastas que ofrecían el actual gobernador y el ex intendente de Morón.

Hay quienes creen que aquella circunstancia puede repetirse. Y que el candidato a diputado nacional en primer término sea el más votado del Frente para la Victoria. La propia Cristina o su hijo Máximo -cuyos nombres se mencionan como cabezas de listas- se transformarían así en los grandes electores del comicio bonaerense y los tributarios de la mayor cosecha de votos.

Ayer, el que habló del tema fue el precandidato a gobernador, Julián Domínguez. “Va a ser una boleta donde nos van a permitir acompañar a todas las fórmulas”, señaló.

Así, por ejemplo, Domínguez podría ir adherido a la boleta presidencial de Daniel Scioli, de Florencio Randazzo y, si se termina habilitando, a un tercer postulante a la presidencia.