Los préstamos del Banco Central al límite

Las crecientes complicaciones fiscales que soportó el año pasado el gobierno lo obligó a apelar más y más a recursos financieros del Banco Central. sin embargo el año pasado quedó cerca de alcanzar el límite de apoyo al Tesoro que establece la nueva Carta Orgánica modificada.

En efecto, el total de adelantos transitorios que la entidad presidida por Mercedes Marcó del Pont aportó para impedir un rojo en las cuentas públicas alcanzó el año pasado los 127.730 millones de pesos, apenas 12.300 millones de pesos menos del límite máximo que establece la norma regulatoria de la entidad , reformada en abril pasado.

Un reciente trabajo de la consultora Economía & Regiones señala que la expansión del gasto público provocada para evitar los coletazos menos deseados de la crisis internacional condujeron a subir la presión tributaria y cuando ésta comenzó a alcanzar su límite, obligó al Banco Central a emitir cada vez más pesos para financiar al Tesoro.

Durante los primeros años el incremento del gasto fue financiado con aumentos de la presión tributaria, que punta a punto creció 15.3 puntos porcentuales en términos del PBI entre 2002 y 2012.

Sin embargo a partir del 2005 comenzó una, la fuerte política fiscal expansiva. Así, entre 2005 (22.4%) y 2009 (26.6%) el aumento de la presión tributaria nacional, que ascendió a 4.2 puntos porcentuales en términos del PBI. No obstante, a medida que la capacidad de subir la presión tributaria se agotaba, el aumento de subsidios (ver pág. 3) comenzó a ser financiado con el Banco Central, cuya asistencia al Tesoro Nacional aumentó 650% entre 2009 y 2012, pasando de $14.000 millones en 2009 a $105.000 millones en 2012 (ver gráfico). Pero, la creciente emisión monetaria del Banco Central para financiar el gasto público, aumentó la presión y las expectativas inflacionarias potenciando la distorsión deprecios relativos.

ADELANTOS

Los adelantos transitorios fueron fundamentales para sostener el gasto del sector público en un año que, según las estimaciones privadas, cerrará con déficit primario por primera vez desde 1996.

Durante 2012 el Banco Central le transfirió $ 60.600 millones al Tesoro por esa vía para ayudar a sostener un nivel de gasto de la administración pública que hasta noviembre que es el último dato conocido crecía 3,5 puntos porcentuales por encima de la recaudación. El fuerte aumento de financiamiento al sector público se disparó tras la reforma de la Carta Orgánica del Banco Central, en abril del año pasado.

La norma duplicó el límite que impone al stock de adelantos transitorios: del 12% de la base monetaria más el 10% de los recursos en efectivo que el Gobierno haya obtenido en los últimos doce meses, al 12% de la base más 20% de los recursos obtenidos. La ampliación sólo puede concretarse con carácter excepcional, pero que a juicio del Banco Central se produjo apenas aprobada la Carta Orgánica.

Según informó esta semana un diario financiero, si a la base monetaria, que al 31 de diciembre, llegó a $ 307.352 millones tras crecer 37,8% en un año, se le suman los recursos que recaudó el Estado durante esos doce meses, el límite actual al stock de adelantos transitorios es de poco más de $ 140.000 millones, apenas $12.300 millones por encima del nivel que alcanzó efectivamente.

De todas formas, esta herramienta seguirá siendo necesaria durante este año, según un reciente informe del Instituto Argentino de análisis Fiscal (Iaraf), que estima que será muy difícil que en 2013 se revierta esta tendencia, especialmente considerando que se trata de un año electoral, en el cual existe alta probabilidad que se aceleren las tasas de crecimiento del gasto. Pero, al haberse acercado tanto al límite, Marcó del Pont se verá obligada a desacelerar el uso de adelantos transitorios. El tope que establece la Carta Orgánica es proporcional al tamaño de la base monetaria y la recaudación, dos variables que crecieron 37,8% y 25,9% respectivamente durante el año pasado. Tanto la base monetaria como los recursos seguirán creciendo, pero los adelantos no podrán mantener el ritmo del 90% al que crecieron en 2012. Un estudio estima que el Central no podrá transferir cerca de $ 50.000 millones al Tesoro este año, $ 10.000 millones menos que en 2012.