La proeza de levantar una ciudad previamente diseñada en un plano

Cuando se decidió la capitalización federal de Buenos Aires y el levantamiento de una nueva capital para la provincia más rica del país, Dardo Rocha eligió unos terrenos surcados por lomas, bañados, arroyos y decenas de cursos de agua de menor porte que corrían de suroeste a noreste buscando desaguar en el cercano Río de la Plata.

La Plata iba a levantarse a 10 kilómetros de la ciudad de Ensenada, en forma lindera al poblado de Tolosa creado en 1871 y a 56 kilómetros de Buenos Aires.

El lugar escogido realmente no era el mejor para levantar una ciudad desde sus mismísimos cimientos, y más aún, para hacerlo en muy poco tiempo. La empresa, si bien era extremadamente dificultosa, no fue obstáculo para que el ingeniero Pedro Benoit respondiera afirmativamente en 1881 y con prontitud a la convocatoria del Gobernador para hacerse cargo, como máximo responsable, del nacimiento de La Plata, trazando el damero fundacional, planificando numerosos edificios públicos y posteriormente supervisando las obras.

La creación de una Ciudad en medio del campo fue una utopía convertida en magnífica realidad, a punto tal que sólo 7 años después de su fundación, en la Exposición Universal de París en 1889, La Plata fue premiada con dos medallas doradas en las categorías “Ciudad del Futuro” y “Mejor realización construida”.

Pero nada fue fácil porque aparecieron los problemas ya dos meses antes de la fundación de nuestra ciudad; los vecinos de Tolosa que tenían cultivos en la zona que ocuparía La Plata y que habían expresado oficialmente su oposición al emplazamiento de la nueva urbe, mantuvieron incidentes con los encargados de abrir las calles que enmarcarían un sector en torno a la futura Plaza Moreno, llegando a quitar y romper la mayoría de los mojones con sus arados.

LA PIEDRA FUNDAMENTAL

El caluroso 19 de noviembre se realizó el acto de colocación de la piedra fundamental, con la presencia del gobernador Rocha y el ministro Victorino de la Plaza en representación del Presidente Julio A. Roca.

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Sobre la avenida 51 se instalaron varias carpas para el asado popular de celebración para el que se habían encargado 200 vaquillonas, pero el calor hizo que la carne se echara a perder y los numerosos concurrentes debieron conformarse con apenas unos pocos bocadillos pese a lo cual no ocultaron su enojo por la situación, la que a su vez fue reflejada al día siguiente por los principales diarios porteños.

MANOS A LA OBRA

Dos días después de la fundación, decenas de obreros que trabajarían en las primeras obras públicas, comenzaron a instalarse en precarias casillas de madera.

El primer edificio en comenzar a construirse fue el de la Gobernación, cuya piedra basal se colocó el 27 de noviembre de 1882, a ocho días de inaugurada la Ciudad.

Con pocos meses de diferencia se iniciaron otras edificaciones como las del Banco Provincia, el ministerio de Hacienda, la Municipalidad, el Palacio de Justicia, la Legislatura, el Banco Hipotecario de la Provincia (luego sede del rectorado de la UNLP), la residencia del Gobernador, la estación de trenes “19 de noviembre” (actual Pasaje Dardo Rocha), la iglesia de San Ponciano, el Departamento de Ingenieros, el Hipódromo, la Dirección General de Cultura y Educación, el cementerio, el Departamento de Policía con anexos de cárcel y cuartel de bomberos; y un par de años más tarde, la Catedral, el Teatro Argentino, el viejo mercado y el Museo de Ciencias Naturales.

En la mayoría de los casos las obras tuvieron un rápido desarrollo, salvo la de la Legislatura y la de la Catedral.

PRIMEROS POBLADORES

La Plata se fue poblando rápidamente, como se dijo, con los obreros de las primeras obras públicas, pero también con los empleados que comenzaban a trabajar en las reparticiones cuyas sedes se iban habilitando parcialmente.

En marzo de 1884 se realizó el primer censo de La Plata, el que arrojó una población de 10.407 habitantes, de los cuales 8.779 eran hombres y 1.628 mujeres. Pero el dato más saliente indicó que vivían en nuestra ciudad solamente 1.278 argentinos, mientras que el resto eran inmigrantes europeos, en su mayoría italianos y españoles.

EL NACIMIENTO DE “EL DIA”

Poco antes de que la Ciudad cumpliera sus primeros 17 años de vida, el 2 de marzo de 1884, hace hoy exactamente 140 años, se fundó el diario EL DIA, el que de inmediato tuvo una amplia aceptación en la población local y un fuerte e incesante incremento de su tirada.

La primera sede del diario se ubicó en 49 entre 7 y 8, y luego se mudó a 51 N° 662 (entre 8 y 9) donde funcionó durante poco más de una década, hasta que el 4 de agosto de 1910 se efectuó la mudanza definitiva a Diagonal 80 N° 817 (entre 3 y 4).

Nuestra casa era originalmente más recudida que la actual, pero se fue ampliando con la adquisición de propiedades linderas.

El edificio de Diagonal 80 fue diseñado y construido específicamente para funcionar como un diario, con su amplia redacción, oficinas de publicidad, talleres gráficos y la vieja rotativa en la que se publicaban los diarios que se distribuían a los repartidores por el acceso especial a tal efecto de la calle 46 entre 3 y 4.

En otro orden, a fines de 1882 se comenzó a emplazar el hipódromo, el que se inauguró oficialmente el 14 de septiembre de 1884; ante unos 4.000 espectadores; ese día se disputaron el Premio Inauguración y el Gran Premio Ciudad de La Plata.

TRANVÍAS Y ALUMBRADO PÚBLICO

La primera línea de tranvías que funcionó en La Plata comenzó a prestar el servicio el 15 de agosto de 1885. Eran unidades tiradas por dos caballos que tenían sus galpones en 7 entre 64 y 65.

El trayecto de la primera línea tranviaria iba desde el galpón por calle 7 hasta la Plaza Italia, donde tomaba por Diagonal 74 hasta Plaza Moreno; allí continuaba por la 51 hasta calle 1 cruzando sobre la Plaza San Martín.

Luego por 1 iba hasta 44 y doblaba por Diagonal 80 hasta 6 y 50, para por ésta última hacer una cuadra hasta 7 y retomar el trayecto hasta su Terminal.

Poco después, desde 1 y 51 de habilitó un ramal que se internaba por el Paseo del Bosque para desde allí dirigirse a la zona de El Dique y regresar por 52 hasta calle 1 y seguir el trayecto hasta 44.

En abril de 1886 primeramente en una reducida zona del centro platense se habilitó el alumbrado público con energía eléctrica, el que poco después se fue expandiendo a sectores más amplios.

De este modo, La Plata se convirtió en la primera ciudad de Sudamérica con este servicio, el cual era provisto por la empresa Brush Electric.

CLUB DE GIMNASIA Y ESGRIMA

El 3 de junio de 1887 a las 20, en dependencias de la Sala de Comercio de 7 entre 46 y 47, fue fundado el Club de Gimnasia y Esgrima La Plata con Don Saturnino Perdriel como su primer presidente.

Un grupo de 29 destacadas personalidades de la Ciudad habían convocado el 31 de mayo a la reunión del 3 de junio “con el objeto de ocuparse de la fundación de un club de gimnasia y esgrima, cancha de pelota, etc.”, dado que “creemos inútil encarecer los beneficios que para la higiene y sobre todo para el beneficio de la juventud reporta esta clase de instituciones”.

TELÉGRAFO Y TELÉFONO

El 20 de agosto de 1887 se inauguró en La Plata el telégrafo y apenas 4 días después, el 24 de ese mismo mes, en la flamante capital bonaerense se habilitó el servicio telefónico.

El teléfono fue muy bien recibido en la Ciudad, pero el servicio era sumamente caro, prueba de lo cual fue que durante la primera década de su funcionamiento sólo se contaba en La Plata con 524 abonados a la empresa Unión Telefónica.

POLITEAMA OLIMPO

La primera sala teatral de importancia que se abrió en La Plata fue la del denominado Politeama Olimpo en 10 entre 46 y 47 y cuya propiedad era de la familia Podestá.

En abril de 1886, en una reducida zona del Centro, se habilitó el alumbrado público con energía eléctrica. Poco después se fue expandiendo

El 19 de noviembre de 1886 quedó inaugurado el teatro, con la presentación de la mundialmente afamada compañía operística encabezada por el célebre tenor italiano Roberto Stagno. La velada se inició con un discurso del gobernador Carlos D´Amico.

Con los años, el Politeama Olimpo pasaría a ser el querido Coliseo Podestá.