Sufrió ataques callejeros y sospecha del ex

Jesica Pibouleau (28), vecina de Villa Elvira, está convencida de que una ex pareja, con la que cortó relación hace casi un año, estaría detrás de una serie de ataques violentos en la calle, en los que la hirieron de arma blanca y hasta le gatillaron armas de fuego en la cabeza. El último de esos episodios fue hace unos diez días.

Según ella misma le contó a EL DIA, nunca vio a su anterior novio en el medio de los ataques. Sin embargo, no duda en vincularlo con las agresiones.

“El era violento conmigo cuando estábamos juntos pero yo nunca me decidía a dejarlo por miedo, porque me golpeaba y hasta intentó tirarme por una ventana. Pero al final me cansé”, relató Jesica acerca de lo que le pasaba en agosto de 2014.

“O sos mía o no sos de nadie”, decía el mensaje que recibió más tarde. Un par de horas después de recibir esa amenaza, desconocidos le dieron una trompada en la calle. El segundo ataque incluyó un culatazo fuerte.

Pero el tercero sería “el peor de todos”, recordó Jesica, vecina de 12 entre 92 y 93. Ese episodio ocurrió a principios de junio, también en la calle. La sorprendió un grupo de hombres que le propinó varios culatazos y la dejó con lesiones importantes en todo el cuerpo.

“Lo peor de todo es que fui a pedir la restricción perimetral de mi ex, con el ojo hinchado todavía, y el juez me dijo que no, por falta de pruebas”, protestó la chica.

“La idea era desfigurarme”

El cuarto ataque data de hace unos diez días. Eran las 7.30 de la mañana, y Jesica iba camino a su trabajo, a pocas cuadras de donde vive, cuando vio venir por la calle a tres sujetos repartidos en dos motos, una Titán azul y una 110. Los que iban en la primera, uno con casco y el otro encapuchado, fueron los que se bajaron del vehículo para cortarle el camino.

“Se me acercaron, me hicieron un corte en un cachete y trataron de sacarme el cuello ortopédico que me había quedado de la vez anterior”, subrayó Jesica.

“También me lastimaron en las dos manos mientras me defendía de que no me dieran en la cara. La idea que tenían era desfigurarme

Inclusive, una de las lesiones más importantes fue en una pierna, que le dejó músculos y tejidos en carne viva. Ni siquiera ella alcanzó a ver si la hirieron con un bisturí, una navaja o qué arma.

Cada uno de esos ataques estuvo acompañado por intimidaciones verbales, muchas veces vinculadas a su ex pareja, añadió la joven.

A partir de este caso la chica volvió a hacer una nueva denuncia policial. Ella comentó que en todos los casos “me toman la declaración y todo se trasladó al juzgado”.

Pero esos trámites parecen no haber hecho mella: “Me cansé de pedir medidas de prevención. Todavía estoy esperando que le prohíban a mi ex, que siempre dijo no tener nada que ver, que se me acerque”, finalizó.