Rescatados de la copa de un árbol
| 27 de Julio de 2001 | 00:00

NEUQUEN.- Cuatro personas debieron refugiarse en las copas de unos árboles en la zona ribereña de esta ciudad, para protegerse de la crecida del río Neuquén, y fueron rescatadas horas después casi "congeladas" por el frío, según informaron ayer fuentes de la Prefectura Naval Argentina.
El dramático episodio se produjo anteanoche en las afueras de esta ciudad, donde dos personas naufragaron mientras navegaban a bordo de una canoa por el río Neuquén.
Al ser arrastrados por la corriente, los dos náufragos lograron tomarse de las ramas de unos sauces, casi tapados por el agua helada del crecido río.
Según se indicó, los dos hombres subieron a las copas de los árboles de la orilla y comenzaron a pedir auxilio, hasta que fueron escuchados por dos policías, el ayudante Nelson Sepúlveda y el cabo Juan Guelard.
Inmediatamente, los policías trataron de rescatarlos, pero quedaron en una situación similar, y debieron subir a otro sauce para no ser llevados por la fuerte correntada.
Finalmente, vecinos del lugar dieron aviso a la Prefectura, que envió una lancha y logró socorrer a los cuatro hombres cuando ya estaban seriamente afectados por el intenso "frío polar" que castiga a la región, y con sus ropas empapadas.
Los damnificados fueron derivados a un centro asistencial local, donde recibieron las atenciones del caso y se constató su buen estado de salud, pese a la situación que debieron vivir.
El dramático episodio se produjo anteanoche en las afueras de esta ciudad, donde dos personas naufragaron mientras navegaban a bordo de una canoa por el río Neuquén.
Al ser arrastrados por la corriente, los dos náufragos lograron tomarse de las ramas de unos sauces, casi tapados por el agua helada del crecido río.
Según se indicó, los dos hombres subieron a las copas de los árboles de la orilla y comenzaron a pedir auxilio, hasta que fueron escuchados por dos policías, el ayudante Nelson Sepúlveda y el cabo Juan Guelard.
Inmediatamente, los policías trataron de rescatarlos, pero quedaron en una situación similar, y debieron subir a otro sauce para no ser llevados por la fuerte correntada.
Finalmente, vecinos del lugar dieron aviso a la Prefectura, que envió una lancha y logró socorrer a los cuatro hombres cuando ya estaban seriamente afectados por el intenso "frío polar" que castiga a la región, y con sus ropas empapadas.
Los damnificados fueron derivados a un centro asistencial local, donde recibieron las atenciones del caso y se constató su buen estado de salud, pese a la situación que debieron vivir.
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