El caso de la enfermera asesina de México

El fenómeno de los crímenes de personas mayores que viven solas no es exclusivo de La Plata ni de la Argentina. En su último número, la Revista Iberoamericana de Geriatría y Gerontología señala que así como en los sesenta se reconocía el abandono y el abuso infantil, y en los setenta el fenómeno del maltrato conyugal, en los últimos veinte años se comenzó a tratar del tema de la victimización de los ancianos. Y en ese marco hace especial referencia a que las personas mayores se han vuelto blancos frecuentes del delito brutal.

En México, las páginas policiales de los diarios más importantes vienen ocupándose hace tiempo de la llamada "enfermera asesina", una mujer que ya ha matado a varias personas mayores en la capital mexicana y que, últimamente, ha vuelto a atacar después de un tiempo inactiva.

DOCE VICTIMAS

Su última víctima -la número 12 en los últimos 14 meses- fue identificada como Socorro Martínez, de 82 años.

El caso de la "enfermera asesina" se ha convertido en una novela trágica que la opinión pública mexicana sigue con interés. Hasta se ha desatado una polémica por la verdadera identidad de la asesina serial que, en todos casos, mata para robar.

Según el procurador de Méjico DF, Bernardo Bátiz, la "enfermera asesina" sería Araceli Vázquez, detenida e imputada por dos crímenes. Sin embargo, la misma policía admite que existen dudas al respecto y consideran que hay otra asesina en actividad.

EN LA REGION

En nuestra región, los crímenes de jubilados se han convertido en una de las principales preocupaciones de los investigadores. Es que en la mayoría de los casos no han logrado dar con los autores de los brutales ataques.

Para ingresar a las viviendas, por lo general, los asesinos engañan a sus víctimas. Les dicen que son empleados de empresas de servicios, vendedores o bien que traen cartas de algún familiar que se encuentra de viaje.

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