Fuertes planteos a los intendentes peronistas y al próximo gobernador
| 5 de Octubre de 2007 | 00:00
Abundaron las críticas a los intendentes del Conurbano a los que se los ubicó en la bolsa de la "vieja política". Y también resultaron llamativas las omisiones sobre Daniel Scioli cuando se expresaron apoyos a candidatos del kirchnerismo. Con esos aspectos salientes, las organizaciones sociales bonaerenses cercanas al gobierno provincial protagonizaron una fuerte puesta en escena frente a la Gobernación, donde el orador de fondo fue Felipe Solá.
El acto fue, en síntesis, un claro mensaje para la administración que viene. Y el propio Solá dijo que desde su gobierno ha comenzado "algo que debe ampliarse", en relación a la participación en el Estado de los movimientos sociales.
"Este gabinete recibió con los brazos abiertos a las organizaciones sociales para implementar los programas que traían. Estamos orgullosos de esa unidad. Hemos generado algo que no tiene nada de coyuntural, algo que debe ampliarse", sostuvo Solá frente a unos 5.000 enfervorizados militantes del Movimiento Evita, Libres del Sur y la Federación de Tierra y Vivienda.
El acto fue callejero -se realizó frente a la Gobernación-, algo inusual en la gestión de Solá y tuvo fuerte tono político, aunque fue ideado como una suerte de balance de la incorporación de estas organizaciones a distintos estamentos del gobierno bonaerense, cuyo funcionario emblema es el vicejefe de Gabinete y referente del Movimiento Evita, Emilio Pérsico.
Los oradores anteriores a Solá fueron dirigentes de segundas líneas de las organizaciones sociales, quienes, como lo hizo el representante de Barrios de Pie, reclamó "una renovación profunda en el Conurbano" (como se sabe, todos los intendentes peronistas van por la reelección) y dijo que con la conformación de las listas de candidatos "se han encendido luces amarillas y callarnos no sería lo correcto". Y la reacción no se hizo esperar: "un minuto de silencio, para Duhalde que está muerto", atronaron los manifestantes,
En el palco, escuchaba atentamente, entre otros, el líder de Barrios de Pie, Jorge Ceballos, a quien el kirchnerismo no le permitió presentarse como candidato a intendente de La Matanza por ese sector.
Sí cerrados respaldos a Cristina Kirchner y promesas de apoyar su eventual futura gestión. En contraste, no hubo ninguna referencia a Scioli.
Solá estuvo acompañado de gran parte de su gabinete y hasta aprovechó para darse un gusto: salió al balcón de Casa de Gobierno para saludar a los manifestantes.
El acto, en rigor, constó de dos partes. La primera, se desarrolló en el salón dorado de la Gobernación y allí estuvo José Scioli, el hermano del candidato y titular de la secretaría general de la Gobernación si triunfa el aspirante oficialista, quien no estuvo en el acto en la Plaza.
El acto fue, en síntesis, un claro mensaje para la administración que viene. Y el propio Solá dijo que desde su gobierno ha comenzado "algo que debe ampliarse", en relación a la participación en el Estado de los movimientos sociales.
"Este gabinete recibió con los brazos abiertos a las organizaciones sociales para implementar los programas que traían. Estamos orgullosos de esa unidad. Hemos generado algo que no tiene nada de coyuntural, algo que debe ampliarse", sostuvo Solá frente a unos 5.000 enfervorizados militantes del Movimiento Evita, Libres del Sur y la Federación de Tierra y Vivienda.
El acto fue callejero -se realizó frente a la Gobernación-, algo inusual en la gestión de Solá y tuvo fuerte tono político, aunque fue ideado como una suerte de balance de la incorporación de estas organizaciones a distintos estamentos del gobierno bonaerense, cuyo funcionario emblema es el vicejefe de Gabinete y referente del Movimiento Evita, Emilio Pérsico.
Los oradores anteriores a Solá fueron dirigentes de segundas líneas de las organizaciones sociales, quienes, como lo hizo el representante de Barrios de Pie, reclamó "una renovación profunda en el Conurbano" (como se sabe, todos los intendentes peronistas van por la reelección) y dijo que con la conformación de las listas de candidatos "se han encendido luces amarillas y callarnos no sería lo correcto". Y la reacción no se hizo esperar: "un minuto de silencio, para Duhalde que está muerto", atronaron los manifestantes,
En el palco, escuchaba atentamente, entre otros, el líder de Barrios de Pie, Jorge Ceballos, a quien el kirchnerismo no le permitió presentarse como candidato a intendente de La Matanza por ese sector.
Sí cerrados respaldos a Cristina Kirchner y promesas de apoyar su eventual futura gestión. En contraste, no hubo ninguna referencia a Scioli.
Solá estuvo acompañado de gran parte de su gabinete y hasta aprovechó para darse un gusto: salió al balcón de Casa de Gobierno para saludar a los manifestantes.
El acto, en rigor, constó de dos partes. La primera, se desarrolló en el salón dorado de la Gobernación y allí estuvo José Scioli, el hermano del candidato y titular de la secretaría general de la Gobernación si triunfa el aspirante oficialista, quien no estuvo en el acto en la Plaza.
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