Denuncia por privilegio a militares
| 10 de Febrero de 2008 | 01:00
El subsecretario de Derechos Humanos del Gobierno de Corriente, Pablo Vassel, denunció y criticó ayer el tratamiento de privilegio que reciben militares detenidos por crímenes de lesa humanidad durante la última dictadura militar.
Vassel advirtió que la atención privilegiada a los militares detenidos representa una violación a la Constitución Nacional.
El funcionario criticó particularmente la situación de los detenidos en un regimiento del Chaco conocido como "La Figurita", donde, según detalló, "la atención a los procesados por parte de personal militar debía reconocer en ellos la graduación de carrera".
El subsecretario de Derechos Humanos correntino advirtió mediante un comunicado que gracias a este tipo de trato la mayoría de los presos "mandaba o podía disponer instrucciones a muchos" de los guardiacárceles.
El funcionario sostuvo que esta situación "repugna" al artículo 16 de la Constitución que consigna que "la Nación Argentina no admite prerrogativas de sangre, ni de nacimiento. No hay en ella fueros personales ni títulos de nobleza. Todos sus habitantes son iguales ante la ley".
"Hasta el asesinato de (el prefecto Héctor) Febres -detenido por crímenes de lesa humanidad-, se sostenía que razones de seguridad justificaban este estilo de detención o arresto, más parecido al de un Country que al de una cárcel", sostuvo Vassel.
Sin embargo, el funcionario correntino destacó que el asesinato de Febres 48 horas antes de que declarara "dio por tierra ese argumento y no quedo más remedio" que respetar los dictámenes de la Constitución.
Vassel advirtió que la atención privilegiada a los militares detenidos representa una violación a la Constitución Nacional.
El funcionario criticó particularmente la situación de los detenidos en un regimiento del Chaco conocido como "La Figurita", donde, según detalló, "la atención a los procesados por parte de personal militar debía reconocer en ellos la graduación de carrera".
El subsecretario de Derechos Humanos correntino advirtió mediante un comunicado que gracias a este tipo de trato la mayoría de los presos "mandaba o podía disponer instrucciones a muchos" de los guardiacárceles.
El funcionario sostuvo que esta situación "repugna" al artículo 16 de la Constitución que consigna que "la Nación Argentina no admite prerrogativas de sangre, ni de nacimiento. No hay en ella fueros personales ni títulos de nobleza. Todos sus habitantes son iguales ante la ley".
"Hasta el asesinato de (el prefecto Héctor) Febres -detenido por crímenes de lesa humanidad-, se sostenía que razones de seguridad justificaban este estilo de detención o arresto, más parecido al de un Country que al de una cárcel", sostuvo Vassel.
Sin embargo, el funcionario correntino destacó que el asesinato de Febres 48 horas antes de que declarara "dio por tierra ese argumento y no quedo más remedio" que respetar los dictámenes de la Constitución.
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