Con el sello del Burrito Ortega
River le ganó bien al Everton inglés con un golazo de su ídolo
| 26 de Julio de 2009 | 00:00
EDMONTON, Canadá.- Con el regreso de Ariel Ortega, lo que no es poco, y frente a un rival de primera línea, como el Everton de Inglaterra, River Plate protagonizó anoche aquí el segundo partido de carácter amistoso durante su estadía en Canadá, país al que viajó para cumplir la preparación con miras al campeonato Apertura y a la Copa Sudamericana, los dos frentes que deberá atender el equipo que dirige Néstor Raúl Gorosito.
Los dos equipos se plantaron con cuatro hombres en el fondo, cinco en la franja central y un solo delantero. Por eso les costó llegar. Pero con ese cuadro de situación, el mejor fue el conjunto Millonario porque metió presión y cuando capturó la pelota la movió con dinámica. O al menos esa fue la intención.
A los 9 minutos llegó River por derecha, con un centro pasado que encontró Archubi, cuyo cabezazo murió en las manos del arquero Nach. Y a los 17 otra vez, ahora con un zurdazo largo de Abelairas que salió junto al palo de la mano derecha del arquero. El equipo de Gorosito apretaba el juego contra el arco de enfrente, pero sin embargo a los 19, de contra, una corrida por izquierda continuó con centro atrás y remate de Blaxter que Daniel Vega tapó abajo en forma espectacular.
El partido ganaba en intensidad, y después de una mini batahola a raíz de una falta que Archubi exageró, llegó lo que todos esperaban: la gran jugada de Ortega. Iban 26 minutos cuando el jujeño recuperó la pelota, se filtró entre los marcadores, ligeramente volcado por la derecha, y desde el borde del área dejó sin chance al arquero picando la pelota por arriba de su cuerpo. Un golazo.
En ventaja, River fue por más e incrementó su dominio sobre un rival cada vez más confundido. Asustó Villagra, que llegó al fondo por derecha y cruzó un centro que nadie conectó; probó Archubi de lejos, desviado; y en la última del primer tiempo Ortega metió para Abelairas por arriba, falló el arquero, que manoteó la pelota y no la retuvo, y Abelairas insistió y le pegó al arco. El palo evitó el segundo.
El segundo tiempo fue de tono menor. Continuó dominando la situación River, aunque sin la profundidad alcanzada en los primeros 45 minutos. Un par de pelotazos largos, algún centro que no encontró a nadie y punto. Eso el equipo de Gorosito, porque Everton nada de nada. No se modificó entonces el resultado y la Edmonton Cup quedó en manos del equipo argentino, que más allá de algunos errores defensivos terminó dejando una imagen aceptable en su segunda actuación de la pretemporada.
Los dos equipos se plantaron con cuatro hombres en el fondo, cinco en la franja central y un solo delantero. Por eso les costó llegar. Pero con ese cuadro de situación, el mejor fue el conjunto Millonario porque metió presión y cuando capturó la pelota la movió con dinámica. O al menos esa fue la intención.
A los 9 minutos llegó River por derecha, con un centro pasado que encontró Archubi, cuyo cabezazo murió en las manos del arquero Nach. Y a los 17 otra vez, ahora con un zurdazo largo de Abelairas que salió junto al palo de la mano derecha del arquero. El equipo de Gorosito apretaba el juego contra el arco de enfrente, pero sin embargo a los 19, de contra, una corrida por izquierda continuó con centro atrás y remate de Blaxter que Daniel Vega tapó abajo en forma espectacular.
El partido ganaba en intensidad, y después de una mini batahola a raíz de una falta que Archubi exageró, llegó lo que todos esperaban: la gran jugada de Ortega. Iban 26 minutos cuando el jujeño recuperó la pelota, se filtró entre los marcadores, ligeramente volcado por la derecha, y desde el borde del área dejó sin chance al arquero picando la pelota por arriba de su cuerpo. Un golazo.
En ventaja, River fue por más e incrementó su dominio sobre un rival cada vez más confundido. Asustó Villagra, que llegó al fondo por derecha y cruzó un centro que nadie conectó; probó Archubi de lejos, desviado; y en la última del primer tiempo Ortega metió para Abelairas por arriba, falló el arquero, que manoteó la pelota y no la retuvo, y Abelairas insistió y le pegó al arco. El palo evitó el segundo.
El segundo tiempo fue de tono menor. Continuó dominando la situación River, aunque sin la profundidad alcanzada en los primeros 45 minutos. Un par de pelotazos largos, algún centro que no encontró a nadie y punto. Eso el equipo de Gorosito, porque Everton nada de nada. No se modificó entonces el resultado y la Edmonton Cup quedó en manos del equipo argentino, que más allá de algunos errores defensivos terminó dejando una imagen aceptable en su segunda actuación de la pretemporada.
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