Chicago fue un equipo vacío y perdió la punta

Comentario ANUAR PECHE

Ay, Chicago... Si uno mira los números, la historia casi que es de color de rosa, ya que el Torito sigue peleando bien arriba en el torneo con Sarmiento, continúa invicto, y no le vienen convirtiendo goles. Pero si se observa al equipo, la realidad es muy diferente; porque el conjunto de Mataderos no puede terminar de definir su personalidad. Entonces, la pregunta que surge es ¿Cuál es el verdadero Chicago?... ¿Es aquel que apabulló a los rivales en las primeras fechas del campeonato -donde mostró varias cuotas de buen fútbol- o es ese que en las últimas jornadas no tuvo siquiera noción de cómo hilvanar dos pases seguidos? Ayer, empató 0 a 0 con Deportivo Armenio y su actuación casi que rozó con los límites de lo desastroso; y como dejó dos puntos en el camino, los de Junín -que le ganaron 1 a 0 a Comunicaciones- se treparon a lo más alto de la tabla de la Primera B Metropolitana.

En el partido con San Telmo -que lo ganó sobre la hora-, Chicago había mostrado un rendimiento muy pobre, pero ayer la cosa empeoró, ya que en Ingeniero Maschwitz no hubo ni un "gramito" de fútbol. Armenio propuso un terrible combate durante todo el partido, y frente a este panorama, el equipo de Mataderos no supo que hacer. Para colmo, los que saben con la pelota (Erviti, Lemmo, etc...) tuvieron los botines cambiados y no acertaron ni un pase. El arranque del Torito entusiasmó -Luca le tapó un disparo a Carboni-, pero después... nada.

Luego, Chicago fue un desorden total (por ejemplo, Russo cruzó varias veces toda la cancha para marcar por el otro sector); y las situaciones de riesgo que tuvo solo fueron por empuje de Facundo Talín y también gracias a las "limitaciones" de su rival, pero cada vez que algún futbolista quedaba frente al arco o le pifiaba o era una "masita" para el arquero Luca. Solo en el segundo, el Torito cambió un poco de actitud. Ahí, el equipo de Leo Ramos fue al frente como pudo para tratar de sostener la punta del torneo, pero la fórmula de los centros no le dio demasiado resultado y de esta manera, dejó dos puntos importantísimos en la cancha de Armenio, que se dedicó a luchar, y obtuvo lo que salió a buscar.