Ferroviarios de línea San Martín suspenden el paro

El gremio de trabajadores de trenes La Fraternidad resolvió hoy en asamblea "dejar sin efecto" la huelga que realizaban en reclamo de seguridad debido a que había tierras del Ferrocarril que estaban siendo ocupadas por unas 500 familias, luego de que la Policía Federal desalojara parcialmente el lugar


Trabajadores ferroviarios de la Línea San Martín levantaron el paro de actividades decretado en protesta por la ocupación ilegal de un predio aledaño a las vías, en el barrio porteño de Retiro, luego de que la Policía Federal lograra el desalojo del lugar, aunque en forma parcial
   
El levantamiento de la medida posibilitó la normalización del servicio que cubre el trayecto entre Retiro y la localidad bonaerense de Pilar, en la zona norte del conurbano.
   
En el marco de la solución del conflicto, se firmó un acta acuerdo entre La Fraternidad y la firma UOFE San Martín, en la que los gremialistas se comprometieron a levantar la medida en caso de que se den las garantías de seguridad y el desalojo de un sector clave del predio.
   
El paro, que se había decretado anoche, fue levantado luego que los trabajadores nucleados en el gremio La Fraternidad consideraran que quedó despejada "la parte operativa" del predio, en el que operan las locomotoras, informó el secretario general del Gremio, Horacio Caminos.
   
Caminos, no obstante, advirtió que "la medida queda latente" por los próximos cinco días y que sigue ocupado un sector de maniobra de cargas, "por lo que se está desvinculado el sector con el Puerto de Buenos Aires".
   
El sindicalista consideró que "hay una utilización política de la gente más necesitada" e hizo hincapié en la peligrosidad que representa la instalación de familias a pocos metros de las vías.  
   
También expresó su convencimiento de que la medida de fuerza fue atinada para "evitar situaciones de violencia, como enfrentamientos entre pasajeros y habitantes del asentamiento" y para que en el hecho "tome intervención el Estado".
   
Por otro lado, se refirió a la contradicción de que personas de bajos recursos ocupen terrenos en uno de los sectores con metros cuadrados más costosos de la Ciudad.
   
En tanto, habitantes de la cercana villa 31, aunque admitieron que el nuevo asentamiento fue conformado en parte por vecinos suyos, denunciaron además la llegada de personas de otros sectores del área metropolitana que "bajaron en micros". 

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