Al mal tiempo le pusieron buena cara

Hinchas del Lobo acompañaron en buen número al equipo de Troglio en una jornada tan incómoda como dasapaciblePor WALTER EPÍSCOPO

El programa no era el mejor para un lunes por la tarde, encima lluvioso. ni hablar que la derrota sufrida en Mendoza por el Lobo y el triunfo de Quilmes ante Defensa y Justicia, ese condimento de partido clave del que se habló durante semanas, ya no era tal. Más allá de la ilusión rota de poder arrebatarle un lugar en la Promoción al Cervecero, el hincha tripero una vez más dijo presente en el Bosque. No importó que el fin de mes se acerque, ni el mal clima, ni que fuese más tentador quedarse en casa mirándolo por tele.

La gente albiazul una vez más le dio su respaldo a un equipo de Pedro Troglio, que quiere despedirse bien, pero de aquí hasta el final parece que sufrirá una agonía tremenda y las 4 fechas que quedan serán eternas.

Pero con la lluvia como protagonista y la noche llegando bastante temprano, las luces se encendieron, en el segundo tiempo llegaron los goles y algo de clima hubo.

Gimnasia y su gente cantando y demostrando que más allá de cualquier lugar en la tabla, siempre estará. por eso lo emocionante de las banderas flameando, las miles de camisetas brotando por todas partes.

Desde el sector visitante también se dio un poco de color, ya que los cerveceros trajeron unas 2.300 personas y estuvieron a muy poco de agotar (había 2.500). Esto hizo que hubiese un poco de "duelo" de tribuna a tribuna, como para sacudir el frío y la lluvia que cayó por momentos.

Las intervenciones de Monetti, el gol de Nico Cabrera y el ingreso a los 30 minutos del complemento de Chirola Romero en la visita, arrancaron aplausos desde la popular local. Era de esperar, el "Chirola, Chirola" iba a brotar espontáneamente cuando el volante oriundo de Berisso ingresara.

"No me importa en que cancha jugués...", cantó una y mil veces la gente desde la popu. Desde la tribuna del Bosque al viejo sector de la chimenea.

El tumultuoso final con las expulsiones le puso un condimento extra y más cánticos de una tribuna a otra.

Un final con aplausos y tratar de salir lo antes posible para llegar a casa y sacarse la ropa mojada. El torneo se va esfumando de a poco y muchos ya piensan en lo que vendrá con ilusión. Más allá de la gente que siempre está, es lo único que queda.

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE