La Comuna habla de “infiltrados” y va con denuncia penal a la Justicia

Aportarán filmaciones de las cámaras públicas de la Ciudad

“Lo que ocurrió nada tiene que ver con un reclamo genuino de taxistas. Fueron delincuentes que actuaron con mucha violencia y hemos realizado una denuncia penal”. Con estas palabras, el titular de Control Urbano, Ignacio Martínez, fijó ayer la postura del municipio en torno a los incidentes que sembraron el terror en plaza Moreno y alrededores.

El funcionario realizó las declaraciones horas después de los hechos, durante un encuentro que compartió con los dirigentes taxistas Juan Carlos Berón, del Sindicato Unión Conductores de Taxímetros, y José Luis Maturana, titular de la Asociación de Conductores “General José de San Martín”.

Además de caracterizar como “delincuentes” a “quienes no llegaron en taxis y fueron quienes ocasionaron los desmanes”, Martínez elogió el accionar policial y subrayó que “se pudo comprobar y filmar la acción de barrabravas infiltrados, que fueron identificados y filmados, y que vinieron directamente a ejercer la violencia. En el recorrido de la marcha, hubo quienes destruyeron varias de las cámaras del monitoreo público urbano MOPU, paradójicamente, porque sirven entre otras cosas para que los taxistas trabajen con mayor seguridad. Además, se vieron coches con los números de disco y patentes tapados”.

“Trabajamos intensamente para combatir el transporte ilegal, y lo que pasó fue una jugada de gente que está al margen de la ley, enmascarada detrás de lo que iba a ser una protesta de los taxistas” explicó Martínez: “la Municipalidad respeta y llama a un diálogo permanente con las entidades con representatividad y personería jurídica, como lo estamos haciendo ahora. Apoyamos al sector y queremos que esté en mejores condiciones”.

En la misma línea, Berón agregó que “tenemos excelente diálogo con las autoridades y también derecho a manifestarnos, pero cuando vimos que comenzaron a llegar personas que no conocíamos, que no eran taxistas y ni siquiera de La Plata, decidimos retirarnos”. Maturana coincidió en que “decidimos dar un paso al costado para proteger a los compañeros, y luego nos comunicamos con las autoridades de la Municipalidad para aclararles que nada teníamos que ver con los desmanes y que ese no era el reclamo genuino de los taxistas”.

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