En el final, Boca encontró una justa recompensa a tanto insistir

S obre el final Boca Juniors encontró el alivió. Había dominado a Cerro Porteño pero no tenía claridad a la hora de definir. Pero Emmanuel Gigliotti, que llegó desde el banco, capturó un rebote en el área y, con tiro corto, a 8’ del final, clavó el 1-0 con que su equipo venció a Cerro Porteño en el partido de ida de los cuartos de final de la Copa Sudamericana. El encuentro se jugó en la Bombonera, ante una multitud.

La serie entre Boca y Cerro Porteño tendrá definición el miércoles próximo, cuando vuelvan a enfrentarse en Asunción y el que se clasifique tendrá por rival, en semifinales, al que surja del cruce entre Estudiantes y River Plate.

En la primera etapa, el equipo del Vasco Arruabarrena no cesó en su ataque, pero lo hizo siempre sin claridad y contundencia, por ese motivo no pudo romper el cero contra Cerro Porteño, que preocupó de contraataque y sufrió un poco en una Bombonera repleta. Cerro Porteño, el equipo más popular de Paraguay y con el karma de nunca haber ganado un certamen internacional, llegó a esta instancia tras eliminar a Rentistas (Uruguay), Independiente del Valle (Ecuador) y Lanús, se plantó con la finalidad de hacerle difíciles las cosas al Xeneize y, si bien incurrió en algunos errores defensivos, éstos no pudieron ser capitalizados por los jugadores boquenses. Después de los primeros 10’ Boca empezó a manejar la pelota con el triángulo que formaban en el medio el juvenil Cubas, Meli y Gago que se paraban unos metros más adelante. Aunque nunca fue claro Boca para atacar. Lo mejor del equipo de Arruabarrena se vio a los 23, cuando Colazo envió un centro al segundo palo. Apareció Fuenzalida y remató cruzado. La pelota pasó lejos del arco, pero antes de que se perdiera por el lateral Chávez la capturó y volvió a meter el balón en el área. El chileno se la bajó de cabeza a Meli que le dio de primera por encima del travesaño. Pero Boca no cedió en su empeño, fue y fue en procura del gol el que finalmente se le dio a los 37’ cuando el refresco Gigliotti aprovechó una serie de rebotes en el área y, con tiro corto, puso el 1-0.