Temen en Nueva York una gran inundación

Numerosas familias se preparan para evacuar sus hogares ante la posibilidad de anegamientos por la nieve derretida

Numerosas familias comenzaron a preparar ayer en el estado de Nueva York sus bolsos con pertenencias esenciales y las escuelas cerraron ante la amenaza de inundaciones tras las intensas nevadas de días anteriores.

Con una temperatura que rondaba ayer los 15º C, los habitantes de Buffalo, segunda ciudad más grande del estado de Nueva York, se alistaron para evacuar sus hogares ante la amenaza de inundaciones por la nieve derretida y el desborde de los riachuelos de la región.

“Ojalá no llueva en las próximas horas para que no se acelere el deshielo, pero de todos modos las inundaciones son nuestra principal preocupación”, afirmó Michelle Pikula, residente de Buffalo, apodada “La ciudad de los buenos vecinos”.

ALERTA METEOROLÓGICO

El Servicio Meteorológico Nacional emitió el domingo una alerta de inundación que rige hasta mañana y advirtió que los árboles, debilitados por el peso de la nieve y el suelo saturado de agua, podrían desplomarse. Ráfagas de viento de hasta 100 km por hora también podrían derribar postes del tendido eléctrico y causar apagones. Para hoy se pronostican posibles lluvias y nevadas.

El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, advirtió a los vecinos de las zonas en peligro de inundación que retiraran cualquier objeto valioso de los sótanos, y les pidió armar bolsos con lo indispensable para una eventual evacuación.

“Mejor pecar por prudentes”, expresó Cuomo en una rueda de prensa en Cheektowaga (condado de Erie, estado de Nueva York). “Hay que esperar lo mejor y prepararse para lo peor, y eso es lo que hemos estado haciendo”.

La mayoría de los distritos escolares permanecieron cerrados ayer y por lo menos cuatro suspendieron las clases para toda la semana, que incluye el sábado el tradicional Día de Acción de Gracias.

En Hamburg (condado de Erie), Pete Yeskoot compró un grupo electrógeno portátil para asegurar que su bomba de agua funcione una vez que se derritan los dos metros de nieve que cayeron sobre su propiedad.

“Detrás de nosotros fluye un arroyo de 29 km, de modo que tenemos que prepararnos para la posibilidad de una inundación”, indicó. “Y dada toda esta nieve, tenemos que anticipar que la chance es muy real”.

Integrantes de la Guardia Nacional pasaron el domingo limpiando nieve de las azoteas y despejando desagües ocluidos por las copiosas nevadas.

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