Continúa el juicio por el caso de la cuidadora del zoo varelense

El Juzgado Correccional Nº 5 de Quilmes a cargo de la doctora Sandra Martucci, continuó ayer con el caso de Melisa Casco, la joven cuidadora del zoológico de Florencio Varela, que falleció tras ser atacada por un oso hormiguero.

El juzgado correccional que enjuicia al empresario Claudio Quagliata por el trágico hecho lo juzga por homicidio culposo y es patrocinado por el letrado Carlos Poli, mientras que el doctor Fabián Améndola asiste legalmente a la familia Casco y la fiscal es la doctora Nilda Fernández Philibert.

El hecho sucedió en 2007, cuando un oso hormiguero llamado "Ramón" hirió gravemente a Melisa Casco, una joven de 19 años, que se desempeñaba como cuidadora en el zoo de Varela. Después de agonizar varias horas, debido a politraumatismos severos, y sufrir la amputación de una pierna, Melisa murió.

La primera en declarar fue Cecilia Diminich, una exempleada del lugar, que durante una hora contó las pésimas condiciones en que trabajaba, casi sin ninguna medida de seguridad a la hora del trato con los animales."Entrábamos a las jaulas solos y sin siquiera un handie para poder alertar algo. Mi vida también corrió peligro en varias ocasiones. Por eso renuncié y las autoridades lo sabían", dijo.

Luego de la renuncia de Cecilia, Melisa fue quien ocupó su lugar en 2007. Tenía 19 años y había entrado como guía, pero a los pocos días fue nombrada cuidadora. Una tarde de abril, como lo hacía todos los días, ingresó a la jaula de Ramón, el oso hormiguero, para alimentarlo. El animal, de casi 100 kilos y 3 metros de largo, la atacó con sus garras.

Melisa murió luego de estar internada durante dos días en el Hospital Evita de Berazategui.

Eduardo todavía no soporta el dolor y agrega un dato: "después de que murió mi hija tres hombres comenzaron a realizar su mismo trabajo y al oso lo aislaron para que no tuviera contacto con nadie. Es decir, si hubieran hecho eso antes yo todavía tendría a mi hija acá"