Se adelantan las liquidaciones de invierno y ya copan todas las vidrieras

EN LOS COMERCIOS CÉNTRICOS YA PLANTEAN DISTINTAS ESTRATEGIAS PARA VENDER MÁS. LOS MÁS BENEFICIADOS SON LOS QUE PAGAN EN EFECTIVO

Pese a que las temperaturas invernales recién se hacen notar en la Región, las vidrieras de la Ciudad ya exhiben una amplia gamas de descuentos para estimular las ventas de la ropa de esta temporada. En promedio las rebajas rondan el 30 por ciento para la indumentaria y el 15 por ciento para el rubro del calzado y los comerciantes apuestan a que el cobro del aguinaldo invite a los platenses a renovar su guardarropas.

Las rebajas alcanzan incluso a las ventas con tarjetas de crédito y de débito, algo impensado durante otras temporadas. No obstante, los que estén dispuestos a pagar en efectivo son quienes logran mejores beneficios. Por caso, una casa de ropa masculina que tiene buzos a $ 375, los vende a $ 338 si es que se paga con tarjeta de crédito y a $ 300 si se abona en efectivo.

Observadores del día a día, y en particular de la altura del mes en el que se está, en otros locales los comerciantes optan por colocar carteles o pizarras con la frase: “sólo por hoy”, acompañada por descuentos que oscilan entre el 20 y el 25 por ciento para ventas en efectivo.

Además están presentes las campañas de distintas tarjetas de créditos que suelen dedicar un día de la semana para realizar importantes rebajas que difunden por ejemplo con lemas como “miércoles de mujer”.

“Suelo comprar marcas que son bastante caras y un 20 por ciento los miércoles puede representar cerca de $ 400 en un abrigo”, cuenta Antonella a la salida de un negocio de calle 9.

Algunas vidrieras ya arriesgan a poner el invierno de remate con inmensos carteles de “Sale”, como es el caso de un negocio de una primera marca de femenina que arrancó las liquidaciones el 1° de julio.

“Todo el año hicimos distintas promociones, algunas semanas rebajamos los pantalones, otras las camperas, pero ahora está todo rebajado al 40 por ciento”, explica la encargada de ese comercio.

Así un abrigo de paño que hasta la semana pasada costaba $ 2 mil, ayer se conseguía por $ 1200; un pantalón pasó de $ 750 a $ 450 y las calzas, de $ 590 a $ 360. A pocos metros de ese comercio, otro local propone un “Big Sale” con remeras a $ 150, buzos a $ 250, sweaters a $ 350 y camperas a $ 500. En tanto que en un local de ropa infantil se venden dos prendas al precio de una, teniendo como referencia la de mayor valor.

DISTINTAS ESTRATEGIAS

Cada comercio trata de establecer una estrategia para despertar las ventas. Marta Ferrari por ejemplo estableció que en los horarios en los que se juega algún partido del Mundial, en su local se hagan rebajas del 25 por ciento o un pago con tarjeta sin recargo. “Este año las ventas vienen complicadas, entonces tratamos de hacer distintas rebajas para captar la atención de las clientas; otra cosa que hacemos es colocar en horarios pico un cartel con rebajas variadas”, asegura desde la puerta de su comercio ubicado en calle 48.

Pizarrones o carteles que se ponen o se sacan, según distintos factores, constituyen una tendencia que se observa en cada cuadra del microcentro, incluso muchos están escritos con tiza para ir modificando porcentajes o productos de acuerdo a la evaluación de la demanda. “Winter Sale, hasta 50 % off”, exhibe un local de ropa de 9 casi 49.

Los descuentos también alcanzan al rubro del calzado, aunque por lo general no son tan pronunciados, ya que las rebajas no exceden el 15 por ciento. Por ejemplo unas botas que costaban $ 989 ahora se consiguen por $ 789.

Después del Día del Padre, los comerciantes apuestan a aumentar las ventas en los próximos días, cuando el dinero del medio aguinaldo ya comience a circular. “Nuestra oferta son los jeans a $ 250, tenemos todos los talles desde el 34 al 50”, afirma la empleada de un local céntrico, mientras a pocos metros una vidriera exhibe la propuesta de llevar tres prendas y pagar dos y favorecerse con descuentos del 20 por ciento por pago efectivo.