Preocupa la calidad del agua en Villa Elisa

Luego de que el martes pasado un comedor infantil de Villa Elisa se enterara de que el agua de red con que venía preparando la comida de los chicos es “no potable” por exceso de nitratos, la calidad del servicio que brinda Aguas Bonaerense se ha vuelto para muchos vecinos de esa zona una tema de gran preocupación.

“El Ministerio de Desarrollo Social de la Nación nos pidió que analizáramos el agua y el resultado fue que se encontró un nivel elevado de nitratos”, cuenta Macarena Gelabert, secretaria del Centro Comunitario “La Cabaña”, donde funciona un comedor comunitario y una copa de leche para chicos de Villa Elisa.

El análisis, realizado por el Instituto Biológico Tomás Perón - que depende del Ministerio de Salud de la Provincia- encontró que el agua de ese comedor tenía una concentración de 62 miligramos de nitratos por litro, cuando ese valor no debe exceder los 50 mg/l para que sea considerada potable.

“Muchos chicos tenían frecuentemente gastroenterocolitis y el médico casi siempre nos decía que era viral, pero ahora nos damos cuenta de que esos cuadros fueron ocasionados por el agua”, comenta la secretaria de la institución, que ya hizo el reclamo correspondiente ante Aguas Bonaerenses.

“Fuimos a ABSA a hacer el reclamo, pero nos dijeron que esos análisis eran viejos y que ellos harían uno nuevo”, agregó Luis Graña, vicepresidente de la entidad.

Pese a que las autoridades sanitarias recomendaron el cierre del centro mientras se investiga la situación, sus directivos decidieron mantenerla abierta para no afectar a las cerca de cien personas, muchas de ellas menores, que acuden todos los días para complementar su alimentación. Y, para evitar riesgos, compraron agua envasada tanto para ofrecer en las mesas como para cocinar.

Como muchos saben, los nitratos se generan en los desechos de las fosas sépticas y en los fertilizantes y son transportados por las aguas subterráneas. En proporciones altas de ingesta provocan metahemoglobinemia o “síndrome del bebé azul” porque reducen la capacidad de transportación del oxígeno a los tejidos, por lo que se desaconseja para lactantes y embarazadas.

Si bien es sabido que el agua de pozo en La Plata contiene altos niveles de nitrato, su presencia en el agua de la red en la Ciudad es una novedad. Esto quizás se deba a que el servicio provee en muchos barrios el producto de una mezcla de agua subterránea -extraída de una red desde distintas perforaciones de la Ciudad- con el agua del Río de La Plata, procesada en la planta potabilizadora Donato Girardi.

Pese a ser consultada por este diario sobre el estado del agua que distribuye en Villa Elisa y las medidas que tomará ante un posible caso de contaminación, Aguas Bonaerenses no ha dado ninguna respuesta aún.