Detuvieron a un policía por golpear a su pareja

El acusado trabaja en la comisaría de Brandsen. La mujer terminó en el hospital San Martín

Los casos se apilan uno tras otro. A poco de conocerse la secuencia en la que el fin de semana un hombre casi incendia su casa luego de golpear a su mujer, ayer la policía capturó a otro sujeto acusado de violencia de género. Esta vez, el detenido es un miembro de la fuerza de seguridad.

Se trata de un teniente de 52 años, numerario de la comisaría de Brandsen, que al parecer tenía una relación con una mujer de 47 años, vecina de 609 entre 123 y 124, en Villa Alba.

La agresión que motivó la intervención de la comisaría de la zona fue lo suficientemente violenta como para que la mujer terminara hospitalizada.

“Se le apareció hoy -por ayer- a la mañana en la casa de ella. Sin decirle nada, le empezó a pegar con todo, patadas y trompadas. La arrastró por toda la vivienda y le siguió pegando. Hasta que se fue”, relató un vocero.

La víctima, de 47 años, necesitó del auxilio de testigos y policías para que la llevaran al Policlínico, indicaron los mismos informantes a este medio.

“si sale me mata”

Mientras se recuperaba, la mujer supo que al hombre ya había sido detenido por efectivos de la seccional 16ª y de la Departamental Zona Sur. Pero la certeza de que podría ser liberado a las pocas horas le generaba pánico a ella.

Tanto era así, que repetía una sola cosa: “Cuando salga, me va a venir a matar”. “Ella insistía con eso porque el sujeto tenía varias armas y municiones. Estaba segura de que cuando la volviera a ver, la iba a asesinar”, subrayó un informante del caso.

Por la insistencia de la mujer los agentes decidieron hacerle caso. Fueron a allanar su vivienda y encontraron una suerte de arsenal: una pistola 9 milímetros, un rifle 5 ½, una escopeta calibre 16 y más de 100 cartuchos de proyectiles, para las distintas armas.

Lo curioso fue que, a pesar de ser policía, “la 9 milímetros no es su pistola reglamentaria. El otro armamento no sería robado pero el hombre no tenía la documentación para acreditar que fuera de él”, aseguró una fuente.

La situación de este agente será revisada por el fiscal Alvaro Garganta y por sus superiores de la dirección de Asuntos Internos del ministerio de Seguridad, confirmaron los mismos voceros.

a punto de quemar la casilla

Otro caso también movilizador fue el de una pareja de Olmos, conformada hace 13 años. Ella tiene 35 años y él, 33. En todo ese tiempo tuvieron seis criaturas y ambos trabajaron en el ámbito de la construcción.

Aunque las peleas “eran constantes”, seguían juntos. Sin embargo, la situación de violencia se interrumpió a poco de terminar mal.

El domingo a la mañana, en una nueva agresión del hombre hacia su mujer él empezara a amenazarla de muerte. Las palabras, siempre según los voceros consultados, llegaron acompañadas de golpes por la cara y el cuerpo.

Pero lo más sorprendente de la situación fue que “él estaba rociando las paredes de madera de la casilla con nafta, haciendo alarde de que iba a incendiar la vivienda”, describió una fuente vinculada.

“Estaba borracho”, soltó al pasar una joven familiar de la chica. “Discutieron y se pelearon. Es algo que pasa siempre. El promete cambiar, pero al final termina en lo mismo”, relató la allegada.

Al final, tanto ese agresor como el policía de Brandsen quedaron presos.

Alvaro Garganta
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