Martino probó con Augusto y Lavezzi, que serían titulares

A Argentina volvió a alterar el ritmo de un lugar que habitualmente sólo tiene estudiantes y profesores. Se trata del complejo de deportes de la Rice University, a pocos metros de la propia casa de altos estudios y del campus de la misma. Allí, con cientos de curiosos pugnando -sin éxito- por entrar, Gerardo Martino reralizó el último entrenamiento en la previa del crucial partido de esta noche frente a los Estados Unidos por la semifinal de la Copa América del Centenario.

¿Los datos más salientes? Durante un breve trabajo táctico llevado a cabo en el campo Rice University Field Complex, el técnico albiceleste disipó un par de dudas, más allá de que no hay nada confirmado: en el centro del campo se la jugó por Augusto Fernández (dejó relegado a Lucas Biglia) y para el extremo volvó a Ezequiel Lavezzi en el elenco principal. La otra opción que se venía barajando era la de colocar a Lamela, pero al parecer el ex hombre del PSG le ganaría la pulseada.

En el resto del equipo ya aparecen bastante claras las cosas, dado que la base , a esta altura y salvo imponderables, parece mantenerse inalterable. Los posibles once para esta noche, a falta de confirmación oficial de Martino (se mostró bastante hermético en la conferencia de prensa) serían los siguientes: Sergio Romero; Gabriel Mercado, Nicolás Otamendi, Ramiro Funes Mori y Marcos Rojo; Augusto Fernández, Javier Mascherano y Ever Banega; Ezequiel Lavezzi, Lionel Messi y Gonzalo Higuaín.

FUROR POR VER A MESSI

Por decisión propia (la organización permite la utilización) el Seleccionado Nacional decidió no utilizar el terreno de juego del Energy Stadium y movilizó su estructura a la Rice University. La delegación de desdobló. Primero, en una van, Gerardo Martino y el jefe de prensa del equipo, fueron al estadio donde se jugará esta noche, para cumplir con el trámite de realizar la conferencia de prensa. La hizo un rato después de Klinsmann (su colega de los Estados Unidos) y duró más de media hora, donde intentó responder algunos interrogantes, aunque otros los dejó en el plano del misterio.

A todo esto, los jugadores ya se estaban trasladando desde el hotel “Saint Regis” (bunker albiceleste) a la Rice University. Allí, una vez juntos, el DT y sus muchachos comenzaron con un trabajo liviano pero no menos importante.

Primero, hubo una entrada en calor para los hombres de campo, mientras los arqueros ya trabajaban bajo el mando del platense Gustavo Piñero. A un lado, se dio una noticia alentadora: Angel Di María pudo tocar el balón y hasta hizo una tarea de velocidad más envíos de centros. Esto, da la pauta de que el Fideo, de pasar Argentina, podrá estar casi con seguridad en la final de New Jersey. Distinta es la situación de Javier Pastore, que solo trotó y está lejos de volver a tener minutos en campo.

Esa fue la única parte abierta para la prensa. Mientras tanto, en los alrededores del complejo, decenas de curiosos (sobre todo niños) pugnaban por entrar aunque no lograron su cometido.

Después, llegó el momento del táctico a puertas cerradas. Allí, el entrenador paró el equipo descripto en el comienzo. Tras la práctica, volvieron de inmediiato al hotel, para resguardarse otra vez en el aire acondicionado y así evitar el agobiante calor reinante en Houston. Argentina, pese al hermetismo, ya tiene todo listo para el crucial compromiso de esta noche.