Trabajar sobre lo construido

Edición Impresa

Trabajar sobre lo construido puede implicar que deban cambiarse los proyectos sobre la marcha.

Sin embargo, el grado de satisfacción del cliente depende de la destreza para transformar en potencial las eventuales dificultades.

El frío de los subsuelos los hace ideales para convertirlos en bodegas como sucede con distintas construcciones de ciudades bonaerenses e incluso en los barrios porteños.

Los enormes ladrillos cocidos de principios del siglo XX requieren de un buen asiento, pero son excelentes aislantes térmicos y acústicos.

La posibilidad de aprovechar la luz es otro aspecto que los clientes destacan. Con pequeñas aberturas en los techos de bóveda, cerradas con vidrio laminado o ladrillos de vidrio, la luz natural crea efectos puntuales muy apreciados.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE