A los 83, murió la soprano y profesora María Gondell
Edición Impresa | 30 de Junio de 2017 | 05:53

La Ciudad se despertó ayer con una triste noticia, sobre todo, dentro del ámbito cultural. A los 83 años, murió la destacada soprano y respetada profesora del Conservatorio Gilardo Gilardi María Gondell. Mary, para algunos. La Gondell, para otros.
Esposa del también músico Lino Bugallo, nació y vivió su infancia y la primera juventud en la ciudad entrerriana de Concepción del Uruguay. Su padre fue José Gondell. Tuvo una casa de ropa -la Casa Gondell- “pero era totalmente filántropo y la perdió”. Su madre, Rosita Garibaldi, maestra, nacida en Concepción, fundadora de la escuela pública conocida allá como “la de Bezzi”. Después cursaría el secundario también en su ciudad, pero ya con la música y el canto pidiéndole más lugar en su vida. La imagen del padre, aficionado a la música, reaparecerá en muchos de sus recuerdos.
Finalmente, cuando se recibió de maestra -“porque había que recibirse, sí o sí”- se vino a estudiar canto en la entonces Escuela Superior de Bellas Artes. Aquí estudió, entre otras grandes, con la profesora Carmela Giuliano y egresó como profesora superior. Muy pronto ganó la beca de perfeccionamiento otorgada por el Fondo Nacional de las Artes. Allí se especializó en repertorio francés y alemán.
Fue patrocinada por el gobierno francés para realizar estudios de perfeccionamiento de canto en París y grabó en la Radio y Televisión Francesa (ORTEF), ofreciendo conciertos de canto en la Maison de l’Allemagne en la Cité des Arts de París.
A partir de allí inició una muy rica carrera como cantante de cámara con numerosas actuaciones en los mejores escenarios de la lírica. En el Teatro Argentino de La Plata actuó en distintos roles en las óperas “La Flauta Mágica” de Mozart, “Carmen” de Bizet, “La serva padrona” de Pergolesi, “Le Astuzie Femminile” de Cimarosa, “Orfeo y Eurídice” de Gluck y “Orfeo” de Monteverdi, entre otras.
También actuó en los teatros Odeón, Astengo y El Círculo de Rosario y el Teatro Auditorio de Mar del Plata, invitada por el Mozarteum Argentino.
Fue dirigida por los maestros Gianni Rinaldi, Mariano Drago, Carlos Berardi, Antonio Russo, Juan Carlos Zorzi, Mario Peruso y Mario Scarabino, entre otros. Actuó en los años 1991, 1992 y 1993 en el Salón Dorado del Teatro Colón de Buenos Aires, bajo la dirección de Susana Frangi, con la Orquesta de Cámara de dicho teatro.
Fue integrante del Cuarteto Vocal de Cámara de La Plata conjuntamente con la contralto Silvia Scollo, el tenor Antonio Bugallo y su marido el barítono Lino Bugallo. Posteriormente integró el cuarteto la mezzosoprano Estela Catalá. Realizó más de 400 conciertos de cámara y oratorios en La Plata y en diversas ciudades de la Argentina. Desde 1965 y hasta el año 1976 integró como solista la Cantoría Ars Nova de La Plata, bajo la dirección del maestro Raúl Carpinetti.
Pero desde enero de 1977 y por cuatro años, actuó en los teatros de San Telmo en el espectáculo “De cuplés y cupletistas” con enorme éxito, junto a Jaime Bauzá como charlista y la pianista Susana Frangi. “Las salas se llenaban noche a noche. Venían figuras muy conocidas, como Mirtha Legrand, Manuel Mujica Láinez, Duillo Marzo, Julia Von Grolman. Con el cuplé gané dinero y pude comprarme un departamento. Eso me hace sonreír, porque estudié y actué tantos años en la música clásica, pero fueron esas canciones madrileñas las que me dieron el gran espaldarazo”, contó hace algunos años.
A la docencia le dedicó también gran parte de su vida. Fue, desde 1979, una destacada profesora de canto lírico del Conservatorio Gilardo Gilardi, en donde dictó clases hasta hace un mes. “Me encanta ser profesora. Soy exigente, pero no soy un monstruo. Mi preocupación esencial es que los alumnos amen a la música. A veces me preocupa pensar que deberé retirarme. Y una vez le comuniqué esa preocupación a Inda Ledesma. Le dije, Inda, yo no quiero dejar de dar clases. A lo mejor me dirán que no vaya más. Entonces ella me dijo: ‘Mirá, María, vos disfrazate de otra y entrá como si tal cosa’”, le contó Mary al periodista Marcelo Ortale, en el marco de una entrevista que fue publicada en EL DIA en 2013.
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