Le dejaron una urna funeraria a un vecino que pelea contra la zona roja

A las 6 de la mañana de ayer Daniel González salió de su casa de 117 entre 64 y 65 como todos los días, para ir a trabajar. Pero un bulto marrón que vio en mitad de la vereda, justo enfrente del portón de su garaje, le llamó la atención por la forma y el brillo que hacía destellar la luz de mercurio de la calle.

Después de acercarse un par de pasos cayó en la cuenta de lo que era y en la conclusión de que ese martes no sería un día como cualquier otro. González, cara visible de las asambleas contra la inseguridad en su barrio, El Mondongo, sospechó que lo que habían dejado frente a su casa era un “mini ataúd”, de 35 por 45 centímetros.

“Los peritos me aclararon después que era una urnita funeraria como las que se entregan en los crematorios, pero lo más llamativo es que estaba nueva, porque todavía tenía el precio, pero sin fondo”, contó el vecino a este diario.

Después de toparse con esa sorpresa Daniel volvió a entrar en su casa, puso al tanto de la inquietante novedad a su mujer y llamó a la comisaría Novena.

“Ellos mandaron un móvil y el Comando otro”, apuntó González.

Más tarde fue el turno de los peritos de Policía Científica, quienes levantaron huellas dactilares, revisaron el contenido del cofre, lo secuestraron y reconocieron ante el denunciante que “era la primera vez que encontraban algo así”, convencidos de que se trataba de un “mensaje intimidatorio”, indicó Daniel.

Luego radicó la denuncia en la seccional de su barrio, la Novena, ante cuyas autoridades han reclamado la puesta en marcha de operativos de control y contra la venta de droga en la llamada zona roja, procedimientos que se profundizaron en los últimos meses.

Justamente, el fin de semana hubo uno muy importante, que terminó con seis detenidos sospechados de integrar una banda de narcotravestis en la zona. González no descarta que lo que pasó ayer tenga alguna vinculación con aquello.

“Se hacen operativos todos los fines de semana”, confirmó, “pero así como sacás a 4 o 5 travestis que venden droga en la calle, al otro día tenés 6 o 7 más”, lamentó.

¿la primera vez?

Además de la denuncia en la Novena, el vecino hizo ayer una exposición en el juzgado Federal Nº 1 de La Plata, cuyas autoridades lo convocaron después de que trascendió la noticia.

Es que desde la asamblea vecinal El Mondongo han impulsado varias denuncias en distintos ámbitos judiciales, en una actividad que comenzó hace 26 meses, con el asesinato del médico Francisco Guerrero en un ataque de motochorros.

En una charla con este diario González negó haber recibido amenazas previas, aunque recordó que “hace unos 20 o 25 días me rompieron el vidrio del portón, pero yo pensé que había sido un acto de vandalismo. Capaz que lo fue, pero ahora ya no se qué pensar”.

Por lo pronto, la causa quedó bajo la instrucción de la fiscalía de Autores Ignorados y se dispuso una custodia policial frente a la casa de Domínguez, quien reconoció que “no puedo tomar esto como algo sin importancia, porque tengo familia”.