Dos motochorros protagonizaron un rápido raid en la zona Norte

Los dos delincuentes que antenoche salieron a cometer asaltos en comercios de la zona Norte platense usaron siempre la misma mecánica.

Por lo que contaron ayer a este diario en algunos de los negocios de City Bell y Villa Elisa en los que actuaron, llegaban hasta esos locales en una moto. Uno se quedaba en ella y el acompañante bajaba a dar el golpe en no más de un par de minutos.

También coincidieron en señalar que cubrían sus rostros con pasamontañas, al tiempo que puntualizaron que tanto la moto en la que circulaban como las ropas que vestían los ladrones eran de color negro.

En algunos locales consiguieron llevarse la recaudación y en otros no lograron su cometido, por diversas circunstancias. Lo que no escatimaron fue la violencia.

En al menos uno de los comercios que “visitaron” quedaron filmados por las cámaras de seguridad, aunque hasta anoche continuaban prófugos.

CON GRITOS Y AMENAZAS

Apenas habían transcurrido unos minutos después de las 9 de la noche del jueves cuando dos empleados de la sucursal de la heladería Thionis que funciona en camino Centenario y 419, de Villa Elisa, quedaron atónitos al ver ingresar apurado a un joven que estaba encapuchado.

Uno de esos empleados, Marcelo Fernández (21), contó a EL DIA que “el pibe se metió acá a los gritos y amenazando con pegarnos un tiro si no le dábamos la plata”.

Para no dejar dudas de que estaba dispuesto a hacerlo, “le puso un arma de fuego en la cabeza a mi compañero que estaba en la caja”, reveló Fernández.

Mientras tanto, el cómplice del delincuente contemplaba la escena desde una moto que estacionaron a pasos de la heladería.

Fernández apuntó que “mi compañero le tuvo que dar la plata de la recaudación (evitó precisar el monto) y se fue corriendo, aunque en el camino se le cayeron dos billetes de 20 pesos. Todo ocurrió en 45 segundos”.

Previamente estos delincuentes sembraron el terror en un par de negocios de City Bell.

Uno fue la agencia de loterías de camino General Belgrano y 473 bis, a donde llegaron a las 20.50 del jueves, cuando ya estaba cerrado y una empleada limpiaba el piso. Los delincuentes destrozaron el vidrio arrojando contra el mismo un adoquín que terminó muy cerca de donde estaba la chica y no la lastimó de milagro.

No pudieron acceder a la caja, y aunque lo hubieran hecho ya no había dinero, pero el accionar fue sumamente agresivo y riesgoso, como se puede ver en la escena que registraron las cámaras de seguridad del local.

Los mismos ladrones metieron miedo también en un supermercado de Belgrano entre 466 y 467. La encargada, Carolina (41), citó que “me pidió la plata de la caja, pero se fue al llegar un cliente”.

Los comerciantes de la zona ya analizan pedir una reunión con autoridades policiales.