“No hay que tenerle miedo a los cambios en la Iglesia”

Edición Impresa

MEDELLIN.- En una multitudinaria misa en el aeropuerto de Medellín, la ciudad con mayor impronta católica de Colombia, país que visita desde el miércoles y hasta mañana con el lema “Demos el primer paso”, el papa Francisco aseguró ayer que “no debe dar miedo” la renovación de la Iglesia y pidió “involucrarse, aunque para algunos parezca ensuciarse”.

“Como Jesús ‘zarandeaba’ a los doctores de la ley para que salieran de su rigidez, ahora también la Iglesia es zarandeada por el Espíritu para que deje sus comodidades y sus apegos. La renovación no nos debe dar miedo. La Iglesia está siempre en renovación”, aseguró el Pontífice en una misa campal para más de un millón de personas, según los organizadores, en la capital del departamento de Antioquía, unos 400 kilómetros al noroeste de Bogotá,

“Quiero agradecer las horas que han pasado acá bajo la lluvia, lamentablemente hubo un atraso significativo en el viaje y ustedes tuvieron que esperar más. Gracias por su paciencia, por su perseverancia y por su coraje”, inició improvisadamente el Pontífice la misa, pasadas las 11 locales (13 de Argentina), de cara a la multitud que hizo vigilia durante toda la noche, en alusión a la tormenta que retrasó los traslados.

Francisco siguió luego con su mensaje más allá de los fieles, con palabras que parecían apuntar también puertas adentro de la Curia romana: “la Iglesia no es nuestra, es de Dios; Él es el dueño del templo y del sembrado; todos tienen cabida, todos son invitados a encontrar aquí y entre nosotros su alimento. Nosotros somos simples servidores y no podemos ser quienes impidamos ese encuentro”, planteó.

A metros del altar, el mismo que usó san Juan Pablo II en su visita de hacer más de tres décadas, Ary Ramos era otro de los fieles que entre chocolate caliente y “tinto” colombiano (café), lleno de color el improvisado centro religioso al que Francisco había llegado en un auto cerrado, y no en helicóptero como estaba originalmente dispuesto, lo que provocó la demora en el inicio de la celebración. Fue la segunda vez que el tiempo obligó al Papa a cambiar un recorrido en las últimas horas, luego de que la presencia del huracán Irma en el Caribe lo forzara el miércoles a cambiar el plan de vuelo del Airbus 330 que lo llevó hasta Colombia.

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE