Reconocen una desaceleración en las ventas en los últimos dos meses desde una empresa líder

Si bien hicieron notar que 2017 fue un año positivo para la venta de cerveza, con una fuerte suba después de tres años de tendencias negativas. Y que los primeros meses de 2018 también resultaron buenos, desde una de las empresas líderes del sector en nuestro país advirtieron que en los últimos dos meses se experimentó una desaceleración en las ventas.

A la hora de explicar esta situación, hicieron foco en factores económicos como el aumento en el precio del dólar, la inflación y los impuestos.

“El año había arrancado muy bien con el consumo, en alza, pero en los últimos dos meses viene desacelerándose, para lo cual no ayudó la reforma impositiva que en nuestro caso aumentó la alícuota del 8 al 14%. Para todo 2018 vemos más presión sobre el consumo y menos crecimiento”, admitió Pablo Panizza, gerente general de Cervecería y Maltería Quilmes, en diálogo con La Nación.

Además destacó: “Hoy el 60% de nuestros componentes están dolarizados, desde la cebada hasta la energía y los combustibles, pero la realidad es que la cerveza es un producto que se consume en todas las clases sociales, con lo cual el precio está mucho más atado al poder de compra del consumidor que al tipo de cambio. Nuestra política de precios siempre estuvo en línea con la inflación o incluso por debajo y no vemos cambios para este año”.

Esta situación, al menos en lo que hace a dicha empresa, plantea algunos interrogantes sobre las ventas en el corto plazo, después de varios meses de bonanza para el sector cervecero.

De hecho, en un relevamiento realizado en base a las ventas de las cadenas de supermercado y una muestra representativa de autoservicios, las ventas registradas por la industria de bebidas alcohólicas en su conjunto cayó durante el año pasado alrededor de un 14%, a excepción de la cerveza que registró un alza en su comercialización del 19% con respecto al año anterior.