Perlitas: un freno de mano sin activar, un loro parlanchín y un sastre particular

Los principales candidatos fueron protagonistas de algunas situaciones llamativas

Con el “Guasón” de Gerli como la más comentada (ver aquí), las elecciones dejaron un tendal de perlitas y, muchas, tuvieron como protagonistas a los principales candidatos.

EL FRENO DE ALBERTO

Cuando estaba bajando del auto para entrar a votar, Alberto Fernández tuvo un pequeño percance que, quizás gracias a la bendición del "falso papa" que lo esperaba, no pasó a mayores. Es que mientras Fernández se disponía a bajar, el auto comenzó a dar marcha atrás porque se había olvidado de activar el freno de mano.

 

Por eso, alertado por los periodistas que lo aguardaban, bajo el grito de “se va, se va”, Alberto se volvió a sentar, lo activó y recién ahí bajo con tranquilidad. Allí, sin querer hacer declaraciones, lo esperaba un personaje muy particular al que se bautizó como el "falso papa".

El hombre, ataviado como Francisco, se presentó como "la cábala del binomio, Alberto y Cristina", y dijo que tras la elección piensan cambiar "el estrés por la alegría". Además anticipó que "después de esto vamos a exorcizar algunas cosas, incluso, la Casa de Gobierno".

En su camino a la UCA, donde votó, otro hombre -que dijo ser su vecino- lo persiguió tirándole pétalos de rosas rojas, todo un gesto romántico que no pasó inadvertido.

EL LORO DE AXEL

Axel Kicillof también fue protagonista de una comentada perlita que se viralizó en las redes a través de fotos y videos.

Como en las PASO, el candidato a gobernador votó en Pilar y, otra vez, tuvo que esperar mucho tiempo para poder votar, debido a la demora que registró su mesa. Pero esa espera fue entretenida y de color porque, para alegrarlo, se acercó un hombre con su loro en el hombro, y le mostró las “palabritas” que repite su pajarito, “sin intenciones políticas”, según advirtió el dueño.

EL SASTRE DE MACRI

Macri también tuvo un recibimiento especial en la mesa donde votó. Allí lo esperó Jorge Williams, un sastre muy particular.

Con traje a rayas -que según contó lo confeccionó él mismo-, envuelto en una bandera argentina y con un gorro negro con cinta nacional alrededor, el simpático hombre aseguró: “Vengo a apoyar al presidente. Esperemos que no vuelvan todos los ladrones, que la gente acompañe a nuestro presidente”.

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