Ushuaia en primera fila: Año Nuevo en el fin del mundo

Si piensan que no hay como el invierno para conocer las maravillas de Ushuaia, la ciudad más austral de la Argentina, se equivocan. Es cierto, a partir de ahora y por lo menos hasta abril, es probable que no asistan a una de sus espectaculares nevadas, sueño dorado de los esquiadores. Pero en primavera, y también en verano, el refrescante clima fueguino ofrece los mejores días para caminar, navegar o sobrevolar los fastuosos paisajes patagónicos.

Las variadas opciones de trekking posibles ofrecen vistas que combinan la inmensidad de la cordillera con sus picos siempre nevados entre las nubes, lagunas de un verde lisérgico, bosques de lengas y turberas sazonados con la idea siempre presente de estar en el fin del mundo. Para fin de año, se pueden encontrar vuelos que rondan los 9 mil pesos. Siete opciones para siete días en la tierra de los yámanas:

1- PARQUE NACIONAL TIERRA DEL FUEGO

Desde ahora y hasta abril son los mejores meses para conocerlo a fondo, porque en invierno la nieve suele impedir el acceso a varios de sus atractivos. Ubicado a 11 kilómetros de la ciudad de Ushuaia, en el extremo sudoeste de la isla, es el único del país que reúne mar, lagunas, ríos y montañas.

Se puede llegar en auto o en las combis regulares que salen desde el centro de la ciudad y recorrerlo a pie. Pero también, es posible contratar una excursión guiada con traslados en combi en las agencias de turismo que se ubican frente al puerto o a lo largo de calle San Martín, en pleno centro de la ciudad. El precio: $ 2.100 por persona.

Una vez en el Parque conviene tomarse un rato para disfrutar, mate en mano, de una vista soñada de la laguna Acigami (ex Roca), un espejo de agua de origen glaciario que se extiende más de cinco kilómetros cuadrados, enmarcado por montañas y bosques. Allí es posible avistar aves autóctonas como el cóndor andino, pájaros carpinteros patagónicos, zorzales y el bello colibrí rubí, el picaflor más austral del planeta. Con suerte, durante el paseo, tal vez se deje ver algún zorrito colorado o alguna nutria huillín.

También en el Parque Nacional, justo donde termina la ruta 3, el punto panorámico más fotografiado es la Bahía Lapataia, un fiordo ubicado en el margen del canal de Beagle, rodeado de montañas. Allí se pueden ver vestigios del antiguo pueblo originario de la región, los yámanas. Si se decide llegar a pie a Lapataia desde la zona de servicios del parque, habrá que estar preparado para un trekking de unas cuatro horas. En Lapataia las temperaturas nunca superan los 10 grados y suele haber nieve todo el año, por eso, es recomendable llevar abrigo y calzado impermeables.

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Otra opción para hacer en el Parque es el “paseo de la castorera” para conocer los sorprendentes diques construidos por los castores. Como se sabe, estos roedores oriundos de Canadá fueron importados hace más de 70 años para fomentar la industria peletera, pero la falta de depredadores los convirtió en una verdadera plaga.

2- NAVEGACIÓN POR EL CANAL DE BEAGLE CON PINGÜINERA

La clásica postal de Ushuaia muestra al faro Les Éclaireurs, mal llamado Faro del Fin del Mundo, emplazado sobre uno de los islotes del mítico canal de Beagle, punto de encuentro de los océanos Atlántico y Pacífico. La navegación por ese canal en verano suma como atractivo la visita a la Isla Martillo, a la que se puede bajar durante una media hora y avistar una colonia de pingüinos Magallánicos, Papúa y algunos pingüinos Rey. Al igual que en invierno, los confortables catamaranes que recorren la zona se acercan a las islas de los Pájaros y de los Lobos. El precio de la excursión, que tiene una duración aproximada de cinco horas, es de $ 3.700 por persona.

3- LAGUNA ESMERALDA

Una de las oportunidades imperdibles que ofrece el verano ushuaiense es esta laguna descongelada, que sorprende por la belleza e intensidad de sus aguas verde-turquesas, rodeadas por el Glaciar Albino, las Torres y el Cordón Toribio. El recorrido comienza a unos 12 kilómetros desde la salida de la ciudad, a pocos metros del centro invernal “Valle de Lobos”. El camino está señalizado y se extiende unos 9 kilómetros que no requieren demasiado entrenamiento (son unas cuatro horas de trekking entre ida y vuelta). El recorrido ofrece imponentes vistas del Valle de Tierra Mayor y Carvajal, bosques de lengas, montañas, glaciares colgantes y turbales con aves. La laguna se hace esperar y recién aparece después de una elevación del terreno, a pocos metros de la costa, lo que genera un efecto sorpresa encantador. Se puede llegar al punto de partida en taxi o en las combis regulares que salen desde el centro. También se pueden contratar excursiones, que incluyen traslados ida y vuelta al lugar de alojamiento, guía y almuerzo. En este caso, el precio es de 4.000 pesos por persona.

4- MUSEO MARÍTIMO Y DEL PRESIDIO

Es uno de los atractivos urbanos más interesantes de la ciudad. La cárcel del fin del mundo nació a fines del siglo XIX y cerró en 1947. Destinada primero a militares y luego a criminales reincidentes, por sus celdas pasaron asesinos célebres, como Cayetano Santos Godino alias “El Petiso Orejudo”, detenido a sus 16 años acusado de asesinar a tres niños. También estuvo allí Mateo Banks, alias “El Místico”, conocido como el primer asesino serial en su época acusado de matar a sus tres hermanos, su cuñada, dos sobrinas y dos peones. El museo conserva una estructura similar a la de los tiempos del presidio, con extensos pasillos y pequeñas celdas en las que se encuentran muñecos con el aspecto de los presos más famosos, vestidos con el clásico traje a rayas azules y amarillas. En las paredes, se puede leer el relato de sus sangrientas historias. En el mismo edificio también se pueden visitar los Museos Marítimo, Antártico y de Arte Marino y hacerse de algún souvenir en el Gift Shop. El Museo abre todo el año de 9 a 20 y la entrada tiene un costo de $ 650 para adultos. Hay descuentos para jubilados y estudiantes y es gratis para menores de 12 años.

5- ESTANCIA HARBERTON:

Es la más antigua de Tierra del Fuego y solo abre al público entre octubre y marzo. Situada sobre el Canal de Beagle, a 85 km al este de Ushuaia, es propiedad de los descendientes de Thomas Bridges, el inglés que la fundó y que estuvo a cargo de la misión anglicana en Ushuaia hacia 1870, antes incluso de que el presidente Roca enviara la primera misión militar para sentar las bases de la argentinidad en el confín del país. La mejor manera de conocerla es tomando una visita guiada que recorre el casco histórico y ofrece excelentes vistas de la bahía, las montañas y las islas del sudeste del canal. El recorrido finaliza en la Casa de Té Mánacatush, que es parte de la antigua casa. Se puede llegar por tierra o por mar. En catamarán se arriba por el Canal de Beagle previo paso por las islas de los Pájaros, de los Lobos y por la Pinguinera. El precio: $ 5.000 por persona.

6- LAGUNA DE LOS TÉMPANOS Y GLACIAR VINCIGUERRA

Este trekking de exigencia media requiere un buen estado físico porque supone una caminata de, por lo menos, siete horas a lo largo de 13 kilómetros. También, es una de las opciones que solo puede hacerse en los meses cálidos y, así y todo, está sujeta a los vaivenes del clima patagónico. La excursión parte a 150 metros sobre el nivel del mar y el Glaciar Vinciguerra se encuentra a 800 metros. A cambio del esfuerzo, el recorrido ofrece bosques, arroyos, montañas con nieves eternas, lagunas y glaciares que parecen verdaderas obras de arte. Los guías aportarán su conocimiento del camino y de la formación de los glaciares. Precio: $ 4.100 por persona.

7- LAGOS OFF-ROAD

Varias agencias de turismo ofrecen aventuras en camionetas 4 por 4, aptas para todo público y clima. En un vertiginoso recorrido se puede observar el Lago Escondido en el fondo de un valle y, luego, el gigantesco lago Fagnano. En estos vehículos es posible cruzar bosques y ríos por caminos que, de otro modo, resultan intransitables. Algunas compañías ofrecen paradas con visitas a refugios, en los que se sirven exquisitos vinos y comida autóctona. Precio $ 5.300 por persona.

El Parque Nacional Tierra del Fuego es el único del país que reúne mar, lagunas, ríos y montañas