En el Centro, saturado por policías, asaltaron un kiosco

Haciendo caso omiso de la razón social, dos ladrones vaciaron la caja de un kiosco del Centro, dejando en claro que no les importó ser filmados por las cámaras de alta definición del negocio, ni que esa zona estuviera atestada de policías abocados a evitar que se instalaran vendedores ambulantes en las calles. Mal no les fue: pudieron escapar.

Sucedió entre las 20.24 y las 20.26 del lunes en el kiosco “No Stop”, que funciona en 7 entre 48 y 49.

Según contó a este diario Ian Sarantonis (20), empleado del local, los responsables fueron “dos pibes de entre 18 y 20 años” que esperaron en la vereda “a que se fueran los clientes que estábamos atendiendo”, para, entonces sí, sacar a relucir sus intenciones.

Una vez que el lugar “se vació de gente uno de ellos se quedó afuera en una bicicleta mountain bike azul fosforescente y el otro entró bien decidido a cometer el robo”. Al que hacía las veces de campana, que procuraba cubrir su cara con la capucha de un buzo gris, se lo veía nervioso, mirando hacia un lado y hacia al otro, cuando no fijaba la vista en su compinche.

Éste, que habría amenazado con sacar un arma, lucía más tranquilo., Con mochila, ropas oscuras y una visera negra. Más allá de los intentos por ocultarse, la filmación los muestra bastante bien.

Antes de que hiciera su ingreso en el local, Ian había ido al fondo: “por eso cuando entró el lo vio solo a mi compañero y amenazó con pegarle un tiro”, reveló el joven, antes de confirmar que el delincuente “se llevó toda la plata de la recaudación y escapó con el cómplice”.

El muchacho calculó que el incidente “no duró más que un par de minutos”, estimación que confirmó el material registrado por las cámaras de seguridad.

El empleado se mostró sorprendido porque al momento del asalto “por la calle pasaba bastante gente”.

No obstante, el delincuente y su cómplice consiguieron confundirse entre los peatones hasta desaparecer por completo de la zona, antes de que se presentara en el lugar el personal policial que había sido alertado por este nuevo caso de inseguridad.

Fue después de un llamado al 911. En la zona se desplegaron ayer centenares de efectivos, en un operativo especialmente diseñado para evitar la instalación de vendedores ambulantes en las veredas céntricas.

Pero nada de eso intimidó a los ladrones, que, se sospecha, cometieron atracos con la misma modalidad en otros negocios de las inmediaciones.