La escalada del billete verde impacta en el comercio local y suma incertidumbre

El cimbronazo que pegó el dólar entre ayer y el lunes, ya se hace sentir en la actividad comercial donde se reitera la frase “no tenemos precios”. Muchos empresarios aseguraron que tienen que consultar los precios hasta tres veces por día y que algunos proveedores no garantizan abastecimiento “hasta que todo se tranquilice”. Según las consultas realizadas por EL DIA hay comercios vinculados al rubro alimenticio que ya analizan incrementos que rondan entre el 25 y el 30 por ciento.

Carlos Riusech, directivo de un frigorífico de la Región, señaló que no deberían reflejarse en estos días aumentos como los que se estiman de entre el 25 y el 30 por ciento, porque en los mostradores se comercializan cortes cuyo precio se estableció la semana pasada. “Eso es parte de un proceso de producción, recibimos lo que se compró la semana anterior; ahora es cierto que no se sabe qué puede pasar la semana que viene”, sostuvo el empresario.

En esa línea, Riusech dijo que ayer el Mercado de Liniers no reflejó el impacto de un dólar cercano a los 60 pesos y que se registró un aumento en la carne vacuna de unos 3 pesos por kilo.

“Hablar de un porcentaje de aumento en la carne hoy no sería prudente, el Mercado de Liniers es una caja de resonancia de lo que pasa en el país y no se vio que los valores se disparen en el porcentaje que se habla”, agregó.

El empresario consignó que son momentos para mantenerse cauteloso y que el sector está esperando alguna medida del Gobierno que lleve tranquilidad al área productiva.

No obstante reconoció que en Argentina el alza del dólar siempre se traslada a los precios y éstos a la inflación.

TRASLADO A PRECIOS

En los almacenes y supermercados coincidieron en que el mayor impacto por el precio de la divisa estadounidense lo tendrían los lácteos y que seguramente en unos días eso impactará en el valor de la leche, la manteca y los quesos.

El titular de una panadería de la zona de 1 y 60 contó que el precio de la harina 000 el viernes último fue de 900 pesos y ayer pasó a 1400 pesos. La margarina aumentó el 20 por ciento en dos días.

“Esto no se puede trasladar a los precios, los cuatro o cinco molinos que trabajan con las panaderías locales nos dicen que hay que esperar que se calme un poco todo”, agregó el panadero.

En ese local, como en otros, optaron por no aplicar ningún tipo de subas en los precios, “si ya las facturas son casi un consumo de lujo, si las aumentamos no las va a llevar nadie”, se escuchó.

La inquietud por un dólar que parece no encontrar techo también se reflejó entre las personas que consumen medicamentos. Muchos temieron que aquellos remedios de laboratorios extranjeros trasladaran a sus productos el aumento de la divisa estadounidense.

Sin embargo, Alejandra Gómez, titular del Colegio de Farmacéuticos de La Plata, fue categórica: “si bien hay actualizaciones, tenemos precios y la producción no se paralizó”.

La profesional remarcó que la formación de precios depende de si se trata de remedios importados y agregó: “muy pocos laboratorios aumentaron y no llegaron a trasladar el incremento del dólar”.

Se llevó tranquilidad a los pacientes garantizando que se mantienen la provisión de medicamentos y la cobertura de las obras sociales.

La incertidumbre ganó también otros sectores como, por ejemplo una óptica de calle 47 en la que se evitaba ayer dar precios de lentes de contacto.

“El viernes costaba 700 pesos el par y hoy que fue mi hija no le querían vender; después como somos clientes se los vendieron pero a 850 pesos”, contó Marisa sin poder creer que el producto hubiera aumentado 150 pesos en cuestión de un par de días.

En el Instagram de otro comercio que se dedica a productos de bazar y regalaría se aclaró ayer: “Queridos clientes, por motivo de público conocimiento no podemos garantizar una estabilidad en los precios de algunos productos expuestos en el local y publicados anteriormente de manera on line. Gracias por la comprensión”.

Es que todos los comerciantes consultados por EL DIA coincidieron en que a un invierno que de por si estuvo complicado en ventas, ahora se le suma la falta de previsibilidad en los costos por el aumento del dólar. Para peor muchos rubros relacionados con los chicos esperaban tener su “veranito” por el Día del Niño y la disparada del billete verde terminó con sus expectativas.

“Muchos juguetes y productos para los chicos son importados y en verdad ningún distribuidor se anima a dar un precio”, opinó un comerciante de diagonal 74 casi Plaza Italia.

Otro sector complicado por la movilidad de los precios es el vinculado a los repuestos.

Darío, al frente de un comercio que lleva 50 años en ese rubro, señaló que desde el lunes todos los productos que comercializa están un 30 por ciento mas caros, sean nacionales o importados.

“Estamos en una encrucijada, tenemos que estar consultando por internet los precios mañana, tarde y noche; si una lámpara costaba el viernes 150 pesos, ahora sale 215 y una batería de 2695 pesos hoy cuesta un 30 por ciento mas”, agregó.

A pocos metros de ese local, un negocio de venta de luminarias se excusó de abrir las persianas. “Esperamos a que se estabilicen los precios, queremos venderle, no robarle”, se leyó.

En tanto la Unión de Emprendedores nacional dijo que “ayer hubo un pequeño caos” y reconoció que dentro de los rubros electrodomésticos, artículos para el hogar y fábricas de maquinaria se suspendieron las ventas y pidieron una semana para ver si se normalizaba el panorama.

La Cámara de Empresas Comerciales y de Servicios también expresó su preocupación por “la implicancia que eso - el dólar - puede tener en el consumo de los argentinos”.