“No es fácil apartarse de la Selección, pero vuelvo a mi casa que es Estudiantes”

Las inferiores de Estudiantes volverán a los entrenamientos en la jornada de hoy en el Country Club con un refuerzo de lujo: Alejandro Saggese. El entrenador/formador vuelve a trabajar en el Pincha, la que él considera su casa, luego de formar parte durante dos años y medio de la estructura de las selecciones juveniles de AFA.

En una extensa charla con este medio, Saggese contó cómo fue su trabajo en la Albiceleste y remarcó que el principal objetivo fue hacerla “federal”. Además se mostró contento por estar nuevamente en el Country Club, aunque aseguró que no fue fácil decirle adiós al predio de Ezeiza.

-¿Qué balance hacés de tu trabajo en AFA?

-Creo que ha sido positivo desde muchos puntos de vista. Uno puede recurrir al tema de la competencia, resultados y fue bárbaro. En ese sentido creo que competimos en 10 torneos y hemos ganado 6 y estuvimos cerca en otros 2. Después más que nada fue establecer ciertas cuestiones relacionadas al trabajo que tienen que ver con vincular el deporte con la educación. Sobre todas las cosas, con unos patrones de comportamiento. Ni más ni menos de lo que sucede en la vida diaria. Vamos a jugar pero no hay cualquier precio, respetando las formas más que nada. No priorizamos el resultado por sobre las formas, más allá de que los resultados son importantes porque es una competencia. Desde ese lado creo que se ha intentado dejar algo.

-Si bien el afuera mira solamente los resultados, para ustedes formadores entonces no es lo más importante…

-Claro, el resultado es la consecuencia de algo. Del trabajo hecho y de parcializar objetivos. No es el gran objetivo final. No valdría la pena salir campeón de una Sub 15 si esos chicos no pasan a la Sub 17 o no trascienden futbolísticamente.

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-¿Un claro ejemplo de eso es la última camada de la Sub 17, que empezaron a formarla en la Sub 15?

-Exactamente. El equipo no renegó nunca de jugar y respetar las formas, más allá del resultado final. En el Mundial uno esperaba, por cómo se desarrollaban futbolísticamente, llegar un poco más. No se pudo pero no significa que haya sido un fracaso. Terminamos conformamos por todo lo realizado.

-¿Costó tomar la decisión de dejar de trabajar en AFA?

-No es fácil apartarse de la Selección. Desde muchos aspectos es fuerte. Escuchar el himno nuestro antes de un partido y sentir que por ahí representa a un ciudadano que está en determinado provincia, enganchó la señal y está mirando el partido y le genera sensaciones el hecho de ver a la Selección, inclusive siendo Sub 15. Mientras cantaba el himno pensaba que un hombre en La Rioja, Formosa o Misiones hay un hombre que trabajó todo el día, o que no, pero consiguió la señal y está gritando el gol de un chico. Es es impagable y te lo permita estar en la Selección. Obviamente hay otras cuestiones.. Llegar a ese nivel nacional es muy lindo.

-¿La salida de Hermes Desio de la coordinación influyó en la decisión?

-Es una decisión que había tomado y en algún punto la salida de Hermes (Desio) ayudó a la determinación social. Soy de Estudiantes y vuelvo a mi casa. Como me mandó alguien, “bienvenido a casa”. Y eso me llena de energía y de emoción. Es difícil describir lo que es Estudiantes para mí, pasé mucho tiempo de mi vida en el club y sé que vuelvo a algo lindo.

UNA SELECCIÓN FEDERAL

-¿Cómo es el proceso hasta llegar a la selección de jugadores y la posterior convocatoria?

-Es uno de los procesos más lindos de estar en la Selección y, a la vez, más complejos. Hay mucha materia prima, muchos chicos que juegan bien. Los clubes trabajan bien. Y entonces uno al elegir pone en evaluación diferentes aspectos, no solamente tiene que ver lo futbolístico. Sobre todo de la persona: ciertos comportamientos en canchas, qué sucede si le cobran un foul en contra, cómo se comparta con el rival y el árbitro, si habla con la gente de afuera o no. No es condenable si tiene un comportamiento inadecuado, pero sí puede ser en algún aspecto a formarlo en dicho sentido. Es un deporte y no se tendría que pelear. Lo más importante es jugar a la pelota y tienen que estar concentrados en eso.

-¿Tuviste que viajar mucho?

-Uno de los objetivos que nos trazamos es hacerlo bien federal. Si vos me decías hay un chico en Misiones que juega realmente bien y hay que ir a verlo, íbamos a ir. No importa en dónde esté jugando. Tienen derecho a ser vistos y eso es una de las grandes satisfacciones que nos dio el trabajo en la Selección. En mi caso no pude llegar a toda la Argentina porque es muy grande, pero no me quedé con el circuito de AFA. Hicimos muchos kilómetros y dándole el derecho a ser visto que pudo haber sido de la liga local de La Plata hasta una liga de cualquier provincia. Después si no es convocado por X motivo, es otra cosa, pero estaba visto.

-¿Se sorprendían esos clubes que vos visitabas para ver a algún chico?

-Han sido muy amables en la recepción. Valoraban que vayamos a mirar un partido y a un determinado chicos. Repito, son chicos y tienen el derecho a ser vistos sin importar en donde jueguen.

-Si bien a vos no te pasó tanto porque trabajabas con jugadores más chicos, ¿molesta que los clubes no dejen ir a los chicos a un Sub 20, por ejemplo?

-Yo no creo que un jugador reniegue de estar en la Selección. Hay casos particulares que son entendibles, porque hay chicos que están en Primera, pero no hay que dejar de darle la importancia que se merece a la Selección Nacional. Como argentinos tenemos que tener la prioridad en la Selección.

SU NUEVO TRABAJO EN el pincha

-¿Cuál va a ser tu trabajo en Estudiantes en este regreso?

-Voy a estar involucrado en la cuestión deportiva, día a día. Cumplir una función en inferiores, colaborando con Pablo (Quatrocchi) y Luciano (Carnevalli), por llamarlo a las cabezas, y voy a cumplir una función también en el fútbol infantil. Es decir, en el día a día y en lo que se refiere a planificación. Eso no quita que siga Pablo coordinado inferiores y siga Omar Bermúdez coordinando infantiles. Me voy a involucrar en el trabajo diario lo que considero en base a la experiencia adquirida y la permanente evolución que uno pretende de sí mismo. Estar ahí metido en eso.

-¿Qué sentís al ver a jugadores que vos dirigiste en Novena, por ejemplo, llegar a la Primera de Estudiantes?

-Es la parte que no se ve para el afuera. El orgullo que uno siente de que has aportado un granito de arena para que los chicos hayan cumplido su sueño. Así también los que que no llegaron, que merecen el respeto de uno y ver qué le aporté para que pueda desarrollar su vida. Eso también es interesante. En lo futbolístico, que lleguen a Primera, es un orgullo para uno.

“Todos los chicos tienen derecho a ser vistos. No pude llegar a todo el país, pero no me quedé en el circuito AFA”