Perú: el Congreso aceptó la renuncia de Merino y se profundiza la crisis política

El presidente interino dejó el Ejecutivo, luego del fuerte rechazo popular. También dimitió su inmediato sucesor, Luis Valdez. Una congresista era candidata a ser su reemplazante. Los 18 ministros seguirán temporalmente

Edición Impresa

LIMA

El Congreso unicameral de Perú aceptó ayer la renuncia del presidente de la república, Manuel Merino, y se aprestaba a debatir quién debe asumir en su lugar luego de que el primero en la línea de sucesión, Luis Valdez, también anunciara su dimisión.

Antes de ordenar un breve cuarto intermedio, Valdez propuso una nueva junta directiva para el parlamento encabezada por Rocío Silva Santisteban, quien, si fuera aprobada esa moción, se convertiría en la primera mujer al frente del Ejecutivo peruano. Anoche se definía.

El pleno del Congreso se reunió ayer por la tarde para considerar la renuncia de Merino -que aceptó con un solo voto en contra y ninguna abstención- y designar a su sucesor, según la emisora estatal TV Perú.

Merino había anunciado su dimisión poco después de ayer al mediodía, cinco días después de haber asumido, en medio de masivas protestas en su contra y luego de que el Congreso lo exhortara a dejar el cargo bajo la amenaza de destituirlo de todos modos.

“Quiero hacer reconocimiento a todo el país que presento mi renuncia”, declaró Merino en un mensaje al país por televisión, lo que desató una celebración en las calles de Lima, al día siguiente de la violenta represión de unas protestas que dejó dos muertos y más de un centenar de heridos.

El elegido será el tercer mandatario en menos de una semana, en una nación muy golpeada por la pandemia del coronavirus y la recesión económica, que se sumió en una crisis política cuando el parlamento destituyó el lunes, en un juicio relámpago, al popular mandatario Martín Vizcarra.

Merino dijo que para que no haya “vacío de poder”, los 18 ministros que él juramentó el jueves seguirán en sus puestos temporalmente, aunque prácticamente todos habían renunciado luego de la represión a los manifestantes el sábado pasado.

Las protestas contra la destitución de Vizcarra y su reemplazo por Merino tuvieron anteanoche las dos primeras víctimas fatales, al menos uno en un enfrentamiento con la Policía.

“El hospital Almenara recibió (de la Cruz Roja) a cuatro personas: tres heridos y un cadáver de una persona de 25 años”, que habían ido a las protestas, dijo a periodistas Alberto Huerta, de la oficina Defensorial del Pueblo de Lima. “La víctima tenía heridas de perdigones en la cara y cuero cabelludo, según el médico”, precisó el funcionario. El diario El Comercio identificó a la víctima como Jack Pintado Sánchez.

Horas después se confirmó el segundo deceso, de un varón de 24 años identificado como Inti Sotelo Camargo, quien llegó con una herida grave en el tórax al Hospital Grau. Según declaraciones del padre y el hermano de la víctima a los medios, el joven habría llegado sin vida al establecimiento médico.

El Ministerio de Salud informó ayer al mediodía que al menos 107 personas fueron atendidas por “distintos tipos de lesiones” producidas durante las protestas de anoche, de las cuales 34 continuaban internadas.

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) señaló en su cuenta de Twitter su preocupación y rechazo a la represión y a la falta de datos sobre el destino de algunos manifestantes, de quienes se desconocía su situación.

REPUDIO DEL GRUPO DE PUEBLA

El Grupo de Puebla rechazó ayer “enérgicamente” la represión de las protestas que dejaron al menos dos muertos, decenas de heridos y 11 desaparecidos en Perú, y calificó de “golpista e ilegítimo” al gobierno del presidente Manuel Merino.

En un comunicado publicado en su sitio web, el foro que reúne a cerca de 50 dirigentes de 17 países de América latina y el Caribe repudió “enérgicamente la represión y el uso indiscriminado de la fuerza por parte de la policía civil” en Perú.

Subrayó que esa represión “desembocó en que distintas organizaciones demandaran a Perú ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para que el Estado garantice la protesta pacífica, el bienestar y el respeto a los derechos humanos”.

El Grupo opinó que la destitución del presidente Martín Vizcarra, el lunes pasado por el Congreso, “fue provocada en un contexto de profunda crisis sanitaria, social y económica, con un alto número de congresistas acusados también por corrupción y a menos de seis meses de las próximas elecciones”.

Agregó que Perú “desde hace décadas no ha logrado conformar un sistema de partidos estable”, lo que provocó “una fuerte crisis de legitimidad y representación”.

“Abogamos por devolver el poder al pueblo peruano y que desde sus bases sociales busque salidas políticas, pacíficas y democráticas” porque “los pueblos deben reencontrarse en la democracia”, sostuvo el Grupo de Puebla.

 

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE