Un platense envuelto en los incidentes y anuncios para “descomprimir”

Nadie puede calcular cuánto influyó el miedo por el coronavirus en las trágicas revueltas que hubo en los penales de Santa Fe, ni la ingerencia que tuvieron las condiciones de hacinamiento o las rivalidades previas, pero lo cierto es que en las últimas horas también hubo incidentes en un par de cárceles bonaerenses: la 54 de Florencio Varela y la Alcaidía de Batán, donde internos provocaron disturbios en el marco de las mismas protestas y esto derivó en peleas entre ellos.

Uno de los que resultó herido es un platense que está preso desde que era menor (actualmente ya pasó los 20), sospechado de haber participado de, al menos, tres crímenes, entre ellos el de un gomero que en diciembre de 2011 fue masacrado a tiros en 520 entre 16 y 17.

Según allegados al interno, que hace tareas de limpieza en la 54, fue atacado en un sector a donde había ido acompañado por otros dos. Su familia pidió que lo trasladaran “urgentemente”.

“Los ánimos están alterados, dentro y fuera de los penales. Es un momento sensible”, argumentaron fuentes oficiales, no sin destacar que se vienen adoptando distintas medidas en las cárceles (más higiene, entrega de elementos de prevención y suspensión de las visitas, entre otras). En este contexto, el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Provincia decidió autorizar a los familiares de los presos que lo soliciten a llevar mercaderías (alimentos y medicinas) a las Unidades Penitenciarias y Alcaidías Departamentales.

La medida contempla la emisión de una acreditación desde el sistema penitenciario en la que se indica el vínculo entre el familiar con el interno y autoriza la circulación.

También se autorizó, dentro de las excepciones del decreto que estableció el aislamiento social obligatorio, la continuidad del servicio privado de encomiendas utilizado por familiares de presos alojados en cárceles del interior de la Provincia, para “llevar tranquilidad a los internos”. Se trata de alimentos complementarios de las cuatro comidas que da el SPB. En las viandas que entregan los familiares, generalmente, hay yerba, azúcar, golosinas y otros artículos de higiene personal.

El permiso de tránsito excepcional al Decreto 297/2020 es emitido por el Servicio Penitenciario Bonaerense, en el que se autoriza a una persona explicitando su nombre y DNI a concurrir desde su domicilio (se especificará la dirección) hasta el asiento de la dependencia carcelaria (también se detallará la dirección), y se señalará el nombre del interno y el número de ficha criminológica. En la autorización se aclara que la circulación pública es para suministrar elementos de higiene personal, elementos de limpieza y/o alimentos perecederos al detenido. El permiso es de carácter intransferible y la persona portadora deberá acreditar identidad al momento de presentarlo.

Será pasible de sanciones penales la persona que realice un uso indebido de esta autorización.