Del respaldo opositor al repudio K a los “intentos de desestabilización”

Las extendidas protestas de la Policía Bonaerense en reclamo de una mejora salarial tampoco quedaron a salvo de la grieta política que divide a la Argentina. Lo que para sectores ligados al oficialismo constituyen “intentos de desestabilización” y “extorsión”, para la oposición embanderada en Juntos por el Cambio representan manifestaciones que “el Gobernador debe atender”.

En ese marco, Roberto Baradel, en su rol de secretario general de la CTA de los Trabajadores de la Provincia, firmó un comunicado titulado “No a los intentos de desestabilización”, desde el que vinculó las medidas de fuerza de los efectivos bonaerenses a “sectores minoritarios” que serían “agitados por la derecha de [Mauricio] Macri y [María Eugenia] Vidal, responsables del ajuste, los bajos salarios y las pésimas condiciones de trabajo en el Estado”.

Para el también referente de los docentes, que expresó su “solidaridad” con el Gobernador y su familia, “acciones de este tipo, como la marcha del 17 de agosto, la reclamada ‘vuelta a la normalidad en pleno pico de contagios, y el escándalo que Juntos por el Cambio protagonizó en la última sesión de Diputados, son un claro, sistemático y coordinado intento de desestabilización de los gobiernos de Alberto Fernández y Axel Kicillof”.

En el texto que lleva su rúbrica, Baradel dijo entender el “legítimo” reclamo salarial, pero interpretó que las protestas ocurridas el lunes en torno a la residencia del Gobernador “buscan otro objetivo” y que la intención sería “generar la idea de ‘desgobierno’ y de un ‘levantamiento ciudadano’ que no es tal”.

Por eso, el líder gremial advirtió que la CTA estará “alerta en defensa de la democracia” para impedir “que se doblegue” la voluntad popular.

Similar fue el tono del comunicado difundido por la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), que salió a repudiar lo que, expresó, son “acciones por fuera de la ley que pretenden condicionar al Gobierno”.

Para la CPM, que, entre otras cuestiones, pidió más control civil sobre las fuerzas de seguridad, las protestas policiales “exceden” el reclamo salarial para “agredir” la democracia y el orden constitucional.

En cambio, las manifestaciones de los agentes bonaerenses encontraron eco en el principal bloque opositor, con el respaldo de los diputados provinciales de Juntos por el Cambio, quienes sentenciaron que la Policía “es el sector estatal más castigado por este Gobierno”.

En su comunicado, los legisladores que responden a Vidal destacaron el “esfuerzo extraordinario” de los uniformados en el contexto de la pandemia, “siempre bajo la mirada indiferente del Gobernador y su gabinete”, acusaron.

Para los diputados opositores, luego de nueve meses de gestión, los efectivos “nunca tuvieron una actualización salarial, ni recambio de móviles, ni mucho menos un Gobernador comprometido con la institución policial y sus familias”, por lo que “les cuesta llegar a fin de mes y muchos de ellos están bajo el límite de la pobreza”.

Luego de asegurar que en la actualidad “se ha retrocedido” en las “mejoras” policiales alcanzadas durante la gestión anterior, el texto opositor concluye exigiendo “una urgente atención al reclamo de recomposición salarial, porque necesitamos una policía de pie, trabajando y con respaldo”, a la vez que pide a los agentes “que no se vea afectado el servicio de seguridad para la ciudadanía, porque hoy más que nunca son los mismos vecinos quienes más valoran y necesitan el trabajo policial”.