Primer debate caliente: cruces entre los candidatos porteños

Los principales candidatos a diputados por la Ciudad de Buenos Aires participaron de un debate televisivo en el que intercambiaron chicanas y ataques, casi sin ofrecer propuestas, para intentar sumar adhesiones rumbo a las elecciones del 14 de noviembre. La mayor parte del tiempo se diferenciaron claramente los cruces entre María Eugenia Vidal contra Leandro Santoro y entre Myriam Bregman y el histriónico Javier Milei.

Se trató del primer debate organizado por el canal TN, que incluyó pocas propuestas para mejorar el nivel de vida de la población y sí muchas chicanas entre Vidal (Juntos), Santoro (Todos), Milei (La Libertad Avanza) y Myriam Bregman (Frente de Izquierda). Los momentos más intensos fueron los registrados durante los denominados “seis minutos libres” y en el segmento “la pregunta y la repregunta”, en los que los postulantes podían hablar y cruzar acusaciones casi sin intervención de los moderadores.

Vidal -que al ingresar al canal resbaló y estuvo a punto de protagonizar un blooper- defendió la gestión porteña y también algunas medidas implementadas durante su gobernación como la ley para evitar las reelecciones de intendentes y el “combate a las mafias”.

Santoro hizo lo suyo con la gestión de la pandemia de la Nación y cuestionó a la administración de Horacio Rodríguez Larreta.

Milei, polémico, rechazó el calentamiento global y repitió su libreto contra “la casta política” que paradójicamente ahora aspira a integrar. Fue el principal blanco de los ataques de la candidata del FIT, que pelea por defender el tercer lugar de la izquierda en CABA donde fue desplazada en el distrito por los libertarios en las PASO. Acusó al economista de “violento” y en más de una ocasión rechazó la vehemencia del postulante liberal. También se permitió chicanear al oficialismo nacional por no cumplir con la “heladera llena”, una promesa de campaña de 2019.

La exgobernadora, por su parte, la emprendió contra la gestión de la pandemia que llevó a cabo el gobierno de Alberto Fernández. Mientras se defendió de un ataque de Santoro por la falta de inversión en escuelas porteñas, contraatacó con los “45 días que ganamos de clases (en CABA) por resistir el cierre de escuelas que militó el Frente de Todos durante un año y medio” al tiempo que consignó que durante su gestión en la Provincia inauguró unos 65 establecimientos educativos.

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Al participar del bloque sobre “Calidad institucional y justicia y seguridad”, Santoro hizo foco en la responsabilidad de Larreta en la falta de control. “Todos sabemos que en (calle) Warnes se consiguen repuestos de autos” y cuestionó que el gobierno porteño “donó 5 patrulleros a 3 municipios bonaerenses gobernados por el PRO” al que acusó de “ despilfarrar recursos materiales y humanos del distrito.

Vidal, por su parte, reivindicó la posibilidad de que haya “alternancia” en el poder y “no como había propuesto Emilio Pérsico (secretario de Economía Social de la Nación) la semana pasada” y también propugnó porque haya igualdad ante la ley “para que no avancen las mafias” y recordó el caso de Lucas, el chico de 17 años asesinado ayer en Quilmes.

Milei, defendió sus “gritos” y su estilo disruptivo, y, al igual que la candidata de “Juntos”, la emprendió contra Aníbal Fernández por “usar información privilegiada para perseguir opositores” al recordar su enfrentamiento con el humorista Nik.

Bregman le respondió que “habla de la casta pero fue asesor del genocida (el tucumano Antonio) Bussi”. El economista la acusó de “caer en falacias” para referirse a su persona. Ambos protagonizaron los intercambios más “calientes”, con reproches y acusaciones cruzadas.

Entre Vidal y Santoro se observó la “grieta” existente desde hace años entre el Gobierno nacional y la principal coalición opositora en temas tales como la pérdida de Coparticipación nacional -$76 mil millones que Nación “le quitó a la Ciudad en plena pandemia”, advirtió la candidata-, en el manejo de la pandemia, en la cuestión educativa pero también en las causas judiciales que tienen como blancos a Mauricio Macri y a Cristina Kirchner.

Milei concluyó su participación al reivindicar su defensa “de la libertad, donde los países más liberales son 8 veces más ricos que los reprimidos” y finalizó su participación gritando su clásico eslogan “Viva la Libertad carajo”.

Todo terminó con una llamativa frialdad y no hubo coincidencia entre cuatro participantes ni siquiera en el lugar elegido para la foto del final.