Tras más denuncias por la vacunación VIP, el fiscal ampliaría las imputaciones

La causa por el “vacunatorio VIP” podría crecer en las próximas horas, si el fiscal a cargo de la investigación, Eduardo Taiano, decide ampliar las imputaciones, a partir de nuevas denuncias presentadas a otros jueces de Comodoro Py, que en las últimas horas fueron girando.

Por eso, la jueza del caso, María Eugenia Capuchetti, le corrió vista a Taiano para que evalúe ampliar el requerimiento fiscal.

Ayer declararon nuevos testigos del hospital Posadas, que ratificaron los llamados de parte del entonces ministro de Salud Ginés González García para que vacunaran a distintas personas. Y por estas horas, los funcionarios analizan toda la documentación secuestrada en el ministerio de Salud y la aportada por los directivos del Posadas para cruzar los datos obtenidos.

Hasta ahora, para Taiano, los imputados son González García y su mano derecha Lisandro Bonelli.

El martes, el director del hospital Posadas Alberto Maceira confirmó que dos funcionarios de la cartera de Salud lo llamaban para avisarle quién iría a vacunarse “de parte del ministro”.

Y también precisó cómo participó del operativo en donde se le aplicaron vacunas a 10 personas en el segundo piso del Ministerio, entre las cuales estaba el periodista Horacio Verbitsky (ver recuadro).

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Según trascendió ayer, era mucho el malestar que había entre los médicos y el personal de salud del Posadas, que veían circular personas que no eran de ese centro asistencial para recibir la aplicación de la Sputnik V, cuando ellos aún no la habían recibido.

Los investigadores creen que fue por ese motivo que se montó el vacunatorio VIP en las oficinas del Ministerio, el día en que fue Verbitsky y las otras nueve personas -entre las cuales estaban Jorge Taiana o Eduardo Valdés-.

Ayer, Capuchetti y Taiano escucharon la declaración de la directora general de Asistencia Médica del Posadas, Lucrecia Raffo, y de la jefa de Coordinación de Atención a Pacientes, Graciela Torales.

Las mujeres, empleadas de carrera del hospital, confirmaron que llamaban desde el Ministerio para avisar quiénes iban a ir a recibir la vacuna. “A Daniel Scioli yo no lo vi, porque ese día no estaba, pero mis compañeros lo vieron. A otros sí los vi”, afirmó una de ellas, según trascendió.

Las testigos confirmaron la versión que plasmó el director del nosocomio y dieron cuenta del “fastidio” que había entre los trabajadores del hospital por ese motivo.

Ahora la jueza y el fiscal se abocarán a cruzar toda la documentación secuestrada en los allanamientos, para avanzar en la investigación. “En el Posadas se aplicaron 6 mil vacunas, los nombres conocidos saltan enseguida, pero hay mucho material para analizar”, afirmaron fuentes allegadas a la instrucción.

Para resolver responsabilidades e imputaciones, deberán analizar cómo se compatibiliza el considerado “personal estratégico” que se dio la vacuna con las prioridades del personal de salud y los más ancianos.